El colchón acumulado en 2020 y buena parte de 2021 está ayudando a sostener el gasto de los hogares navarros en este arranque de 2022, marcado por un alza generalizada de los precios. Las familias están echando mano de un ahorro que batió todos los registros durante la pandemia y ello está ayudando a que el consumo se sostenga en el entorno de inflación más complicado de las últimas cuatro décadas.

Los datos del Banco de España cuentan una parte de esta historia. Las familias y las empresas navarras ahorraron más de 2.200 millones de euros entre enero de 2020 y junio de 2021, cuando la extensión de las vacunas propició el inicio del regreso a la normalidad. Nunca, en toda la historia reciente, se había ahorrado tanto. En junio de 2021 había 19.896 millones de euros en depósitos bancarios y cuentas corrientes, la fórmula de ahorro que proporciona una mayor liquidez y acceso al dinero. El máximo histórico.

Desde entonces, el comportamiento ha cambiado: ya en el tercer trimestre del año, el ahorro bancario se redujo con cierta fuerza -registró su mayor caída desde 2012, en lo más crudo de la anterior crisis económica- y en el último trimestre del año experimentó un leve incremento, inferior en todo caso al habitual en este trimestre. Los navarros cerraron por tanto 2021 con 19.684, millones en el banco, unos 200 millones menos que antes del verano, que se destinaron, en parte al gasto. Se trata nuevamente de la mayor caída en un semestre desde el año 2014.

“En el primer trimestre de 2022 el consumo se ha moderado”, explican desde BBVA, que en el caso de Navarra lo atribuye al impacto de omicron, que acarreó restricciones en la hostelería más duras que en comunidades como La Rioja o la Comunidad Valenciana, donde el consum ha mantenido su vigor. El turismo, como ha mostrado una Semana Santa muy satisfactoria para el sector, y las previsiones de verano -las agencias ya anticipan una recuperación muy importante en los destinos de larga distancia- va a ser uno destinos principales del gasto a nada que la situación internacional lo permita.

Otros factores están frenando el alza del ahorro en los último meses. La subida de precios no solo obliga a gastar más para comprar lo mismo; también merma el valor del dinero ahorrado, por lo que los ciudadanos buscan alternativas. Otros productos financiero, como los fondo de inversión, acumulan ya años de crecimiento. Pero ha sido la vivienda, con los mejores datos de ventas desde antes de la crisis, la que parece estar canalizando parte de ese sobreahorro: las 6.479 operaciones de compraventa reflejan un mercado especialmente dinámico, que solo en los dos últimos meses parece haberse frenado algo, quizá también como consecuencia de la continúa subida de precios y de una menor oferta.

Esta reducción del ahorro parece en todo caso muy moderada y pasajera. Y llega además después de una década larga de fuerte desendeudamiento. Familias y empresas adeudan a la banca algo más de 15.500 millones de euros. Es decir, unos 4.000 millones de euros menos de lo que tienen disponible en sus cuentas.