El colectivo de autónomos en Navarra envejece, con 9.000 trabajadores por cuenta propia que tienen 55 años o superan esa edad, según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social, correspondientes al tercer trimestre de 2022. Por primera vez en el último lustro, han superado esa barrera, y la savia nueva representada por los jóvenes no despega, incluso el número de autónomos menores de 25 años descendió en 2022, al pasar de los 543 a los 521; y el tramo entre 25 y 39 años ha quedado estancado, en los casi 6.000.

Estos datos se corresponden a los autónomos personas físicas que suman 26.466 en la Comunidad Foral, que no están integrados en sociedades mercantiles, cooperativas u otras entidades societarias y que tampoco son colaboradores familiares ni están registrados como parte de algún colectivo especial de trabajadores. A estos se unen casi otros 21.000 autónomos constituidos como personas jurídicas.

"Un plan de empleo joven"

El presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) de Navarra, Juan Carlos Equiza, muestra preocupación por esta evolución, y propone el impulso de “un plan de empleo joven, con el apoyo de la Administración, para atajar este problema, y atraer al perfil de emprendedor de menos edad”. También considera fundamental impulsar acciones para cambiar la figura estigmatizada del empresario. “La imagen de autónomo endemoniado que quiere aprovecharse de cualquier situación no ayuda a que los jóvenes den el paso, y entre todos debemos trabajar para acabar con este concepto erróneo”, manifiesta Equiza.

"Desconcierto"

El presidente de ATA en Navarra también recuerda el “desconcierto” que ha generado entre el colectivo el nuevo sistema de cotización de autónomos por ingresos reales, cuya primera cuota se descontó el martes 31 de enero. 

La fórmula que ha entrado en vigor cuenta con un periodo de transición de nueve años, hasta 2032, y está compuesta por 15 tramos de cuotas que van desde los 230 euros hasta los 500 euros y variarán hasta 2025, en función de los rendimientos netos de los trabajadores por cuenta propia. 

Los autónomos tienen la posibilidad de variar de tramo cada dos meses, con un total de seis cambios al año, para adaptar su cotización a las previsiones de ingresos en cada época del año y de su actividad profesional.

“Cualquier novedad crea incertidumbre, pero debemos apelar a que todo se va a solucionar”, señala Equiza. Califica de “positiva” la reforma realizada para que así “el autónomo pague por sus rendimientos netos”. Aunque reconoce que estos trabajadores por cuenta propia tendrán que recurrir a asesorías “para solucionar las dudas”.

Por último, en relación al incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), Equiza resalta que “el colectivo lo acoge como un gasto más que debe asumir y añadir al resto de costes que han incrementado en los últimos meses, como luz, combustible o energía”. Sin embargo, deja una pregunta: “¿Qué haría una persona si observa que un gasto le sube un 47% desde 2018 -como el SMI- y se suma al resto de facturas; pero, en cambio sus ingresos apenas han variado desde entonces?”.