Momentos de tensión a la entrada de BSH Electrodomésticos en Esquíroz tras la protesta iniciada por el comité para exigir a la dirección participar en la negociación sobre el futuro de la planta.
Cuatro furgonas de Policía Foral se han desplazado hasta la factoría con la presencia de antidisturbios.
LA PROTESTA
La parte social no había comunicado internamente a la plantilla esta protesta, pero cuando se han ido enterando los operarios, han dejado sus puestos para salir a la calle a unirse a esta acción.

Han protagonizado una sentada para evitar que los camiones accedieran a la factoría. En esos momentos, agentes de la Policía Foral han intervenido y han apartado a trabajadores que interrumpían el paso para permitir que entraran los vehículos pesados.
El fabricante de electrodomésticos concentra la producción principalmente a la mañana, por eso es cuando más tránsito hay. En el periodo que ha durado la protesta, entre las 8.00 y 10.30 horas, unos ocho camiones se han visto afectados.
ENCUENTRO
La parte social ha mantenido un encuentro con la dirección local, la cual ha insistido que Pepe Juste, responsable de operaciones de BSH España, a quien iba dirigida la misiva del comité, no tiene potestad para tomar una decisión sobre su petición.
El presidente del comité, Juanjo Hermoso de Mendoza, ha insistido en que continuarán con un calendario de movilizaciones para lograr su objetivo de ser agente activo en este proceso. Sin embargo, no ha querido adelantar los nuevos pasos que van a dar.
Hermosos de Mendoza sí ha adelantado que los próximos días mantendrán un encuentro con el Gobierno de Navarra, a través del departamento de Industria de Mikel Irujo.La dirección de la planta les ha emplazado a la reunión del 31 de marzo.
A las 11.00 ha regresado la normalidad. Los antidisturbios se han retirado increpados con gritos por la plantilla.
RECHAZO A FORMAR PARTE DE LA NEGOCIACIÓN
El comité ha insistido en que se considera parte esencial en este proceso, ya que representa a un colectivo de 660 empleados y empleadas; sin olvidar a los más de 400 puestos indirectos que dependen de BSH.
Los sindicatos habían enviado a la empresa un correo electrónico en el que solicitaban ser incluidos en esas reuniones. “Nosotros no queremos que nos comuniquen cómo evolucionan las negociaciones entre ellos y las administraciones en la búsqueda de un futuro para la factoría; nosotros exigimos participar en la toma de decisiones. No queremos que nos ocurra como en la antigua Ufesa de Vitoria, que fueron adquiridos por un grupo hace unos años y ahora están en concurso de acreedores”, ha repetido el presidente del comité.
Primera protesta
Ante la falta de noticias de BSH, los sindicatos han iniciado este mañana a partir de las 8.00 una acción en la fábrica, consistente en evitar que entren materias primas a la planta o salgan productos acabados -frigoríficos y lavavajillas-. “Por el momento, los miembros del comité vamos a realizar esta movilización porque creemos que es nuestra obligación para luchar por cada puesto de trabajo”, ha remarcado.
La parte social, compuesta por siete delegados de UGT, tres de LAB, dos de CCOO, dos de ELA, dos de ATISS y uno de Solidari, han rechazado el veto de la empresa y han exigido su reconocimiento como negociadores en este proceso.
BSH ha contratado a la consultora holandesa Metiys para intentar buscar un inversor.
"Una alternativa de continuidad"
El consejero de Industria y Transición Ecológica y Digital Empresarial del Gobierno de Navarra, Mikel Irujo, reclamó el pasado miércoles que la empresa BSH asegure la continuidad de la planta de Esquíroz "hasta que por lo menos haya una alternativa industrial" al cierre que anunció la compañía el pasado 16 de diciembre.
"Nuestro diálogo y contacto con el comité de empresa ha sido permanente, ha sido semanal, y les hemos ido trasladando cualquier información que podía ser de interés para el propio comité de empresa y las 660 familias que trabajan en la fábrica", indicó Irujo.