Dicen los sabios de la cosa jurídica que toda ley se debe aplicar en relación con su contexto, pero se ve que la Ertzaintza no entra en esas sutiles disquisiciones, y ha abierto expediente y anunciado sanción a cuatro jugadores del Athletic por “concentración no comunicada” en el centro de Bilbao, con kalejira, electrocharanga y, claro está, cientos de aficionados uniéndose al fiestón.

Y no vamos a decir que sea una sanción injusta –las ciudades cada vez castigan más, y con razón, esto de los decibelios excesivos a según qué horas–, pero poca mano izquierda hemos visto ahí con un logro tan histórico. Ya ha triunfado la broma de que debían de ser ertzainas de la Real, pero nuestras verdaderas dudas son si será una sanción simbólica o un multón en toda regla, y, sobre todo, si la pagarán los cuatro jugadores (¿por qué solo cuatro si estaba todo el equipo?) o la incluirá el club en la partida de primas por el título. Que quizás sería lo suyo.