PAMPLONA. Joxe Vicente Eguzkiza es una leyenda de los deportesde contacto. Lo fue todo como luchador, en varios pesos y modalidades(full contact, kick boxing, savate o muay thay). Asegura quesu habilidad es algo innato, que peleando "siempre lo he vistotodo muy fácil. De chavales, en la cuadrilla veíamos boxeo enla tele, los míticos combates de Alí, por ejemplo, y despuésnos poníamos unas toallas en las manos y les imitábamos. Y yoles zurraba a todos sin tener ni idea". Eguzkiza habla con sinceridad.Y sus 102 victorias en 103 combates, con nada menos que 67 K.O.corroboran su versión. En toda su carrera solo le derribaronuna vez, y aunque "no se me olvida... no se me olvida", JoxeVicente se levantó y ganó el combate.
Ahora, a sus 52 años, este deportista que fue campeón de Euskadide natación antes de subir a un cuadrilátero, dirige el gimnasioKanku de Burlada, da cursos y charlas y organiza veladas. Además,uno de sus tres hijos, Aitor, ha recogido el testigo familiar,y el pasado 19 de noviembre se convirtió en campeón del Mundode K1 en los pesos superligeros.
¿Tiene la misma pasión por su deporte que cuando competía?
No. Cada vez me gusta más hacer cosas que no tengan nada quever con lo mío. No es como antes, que toda tu vida y energíaiba encaminada exclusivamente a esto. Y también me he vueltomás perezoso. Además, arrastro un dolor de espalda crónico queme está fastidiando mucho y me ha hecho ser más vago. Por ejemplo,me da más pereza viajar, y antes estaba todo el día por ahí.Ahora también me toca moverme bastante, pero intento que no seamuy seguido, porque es duro.
¿Y qué le gusta hacer?
Donde mejor me encuentro es en casa. Vivo en Errea, en el Vallede Esteribar. Es un pueblo de ocho casas, muy tranquilo. Unova cambiando, y la edad también se nota. Ahora me gusta la tranquilidad,la naturaleza, los animales... En casa tenemos gallinas, un cerdo,ahora también una cabra, y el pueblo está lleno de vacas y yeguasde carne. Allí estás en un entorno privilegiado, en plena naturaleza,con unas vistas impresionantes de todo el valle. Y nos hemosvuelto tan raros que nos molesta hasta que vengan a por setas.
Así que hay vida después del kick boxing...
Claro que hay otras cosas, y en mi caso son las más sencillasdel mundo. Me encanta estar a gusto y tranquilo con amigos deconfianza, juntarnos el fin de semana para comer en nuestro puebloo en el de alguno de ellos. En general nos juntamos con gentede pueblos. Claro que también me apetece estar en mi gimnasio,con mi gente, porque estoy muy a gusto y me llevo muy bien contodo el mundo. Y después me voy a casa tranquilamente, sin ningúnsemáforo. Eso sí, alguna vez sale un jabalí que te destroza elcoche, como nos pasó hace dos semanas. Y cuando hay nieve a vecesno puedes salir. Es lo que tiene la naturaleza...
¿Su casa es su lugar preferido?
Depende de para qué. Mi mujer es cubana y solemos ir una vezal año a Cienfuegos, un sitio precioso. Pero si vas en veranopasas tanto calor que se te olvida que es bonito. También vamosa Bocaciega, en la Habana, una zona de playas a la que yo ibamucho. En mis tiempos solía alquilar una casita a 50 metros dela playa, y eso era una gozada. Esos dos sitios me gustan mucho.Me encanta la montaña del País Vasco, ese verde de aquí, y Cuba.Son los lugares que más conozco y los que más recuerdos tienenpara mí.
¿Cuál es el lugar que más le ha llamado la atención?
En general, los países orientales, como China o Tailandia, porquees todo muy diferente y existe un gran contraste, por ejemplocon los olores. Allí toda la calle huele a comida. Sin embargo,Europa me da hasta un poco de asco, porque es todo lo mismo,todos los aeropuertos iguales, todas las calles iguales...
¿Y el viaje con en el que más ha disfrutado?
Uno que hice a Argentina en 2009, con 25 chavales de pueblosde Navarra, casi todos de fútbol y un grupo de kick boxing. ConocimosIguazú, el Perito Moreno, Buenos Aires... el viaje me encantósobre todo por el ambientazo que llevábamos nosotros, que eraimpresionante. Eso hace mucho, porque yo puedo ir a los mismossitios solo y que no me digan nada. Iba con Carlos Ceballos,un gran amigo mío con el que me iría a cualquier lado, porquenos conocemos desde hace muchísimo y nos gusta lo mismo: La buenacomida, la buena compañía, la gente maja, la sencillez...
¿Qué otras aficiones tiene?
Me gustan muchas cosas, como por ejemplo llegar a casa y veruna buena película por la noche, para olvidarme un poco de lomío. Y siempre voy con mi mujer al cine un día a la semana. Lohacía mi padre y yo también he cogido la costumbre. Al principioiba un poco obligado, porque había que cumplir... pero ahoravoy muy a gusto. Y cuando la película es un rollo me duermo directamente.Además, ahora puedes hacerlo con total tranquilidad porque haymuy poca gente en el cine.
¿Una película que le haya dejado un buen recuerdo?
La primera vez que vi El cazador, con Robert de Niro, me impresionó.Y, por ejemplo, otra que no me pega mucho, como Memorias de África,me encantó. Es una historia de amor y tal que a priori no medice nada, pero esos paisajes, la música...
¿Y le gustan las películas de artes marciales?
No las puedo ver, me parecen excesivamente ridículas. No me gustanporque son estúpidas. Suele pasar. Si eres aizkolari y ves unapelícula de aizoikaris pensarás en lo mal que lo hacen, que elcorte no es así... A mí me pasa lo mismo. Soy muy crítico conlo mío, y no puedo ver las cosas mal hechas. De otras cosas noentiendo, y entonces me las trago como todo el mundo.
¿La imagen de esas películas perjudica a su deporte?
Creo que la gente inteligente sabrá diferenciar una películade la realidad. Yo he conocido a Jean Claude Van Damme personalmente.Vino a una pelea mía, y estuve cenando con él. Me preguntabasi son duras las patadas en las tibias. Pues hombre, sí, le decíayo mientras pensaba "pues fíjate cuánto sabe éste". Y la gentepensaba que era Superman. Sí, ha hecho artes marciales, y esun tío muy elástico porque también hacía ballet, pero sobre todoes actor. Malo, pero actor.
Quizá vendan una imagen del luchador excesivamente macarra
Sí, y los macarras es algo con lo que no puedo. Y veo muchosen las últimas generaciones. También hay chavales modélicos,pero estas pandillas que van con el full equip, el pelo paraarriba, la crestita, los pendientes, todo el cuerpo lleno detatuajes... no los puedo ni ver. Se ponen una coraza para irde duros, cuando realmente son todo lo contrario. Siempre hahabido modas, pero es que lo de ahora...
¿Es peor que antes?
Yo creo que sí. Esto empezó a cambiar cuando al padre se le dejóde llamar padre y se le llamó papá, o aita, o lo que es peor,por su nombre. Mi hijo no me llamará Joxe nunca, porque no lesale, y si se le ocurre no se lo permito. No me gusta. Yo soysu padre, no su amigo. Y me llevo muy bien con él, pero no pretendoser su amigo. No es de mi generación, intentaré entender lo quepueda y él hará lo mismo. Evidentemente, no hay que ser un dictador.Mi padre no lo era. Era un tío bastante abierto, pero yo le teníaun respeto porque era mi padre. Estaba por encima de mí, yo losabía y se acabó. No tiene nada de malo, y no quita para quediscutiera con él sin consideraba que no tenía razón. Claro queen mi casa tampoco discutíamos mucho, porque había temas tabús:la política, el sexo y la religión... ¿y entonces de qué hablas?Mi padre era muy religioso, a la política le tenían el miedoese de la Guerra Civil, de no hablar no vaya a ser que te oigan...y del sexo... en mi casa (ríe), bueno, por descontado que nohablábamos de esas cosas.
¿Y ahora en su casa se habla de esas cosas?
Tampoco hablamos de sexo porque paso, así de claro. De políticatratamos cosas concretas, "esos sinvergüenzas tal y cual". Yde religión, cada uno dice lo que piensa. A mí en particular,y respetando todas las creencias, la religión no me convence.No soy nadie para decir si existe un Dios o no. Yo creo en laley natural que uno tiene. Está claro que no matarás, no robaráslo que no es tuyo ni te acostarás con la mujer de tu vecino,porque no está bien. No hace falta que venga un cura ni nadiea decírtelo. Uno sabe qué está bien y qué está mal. Que se busquendespués excusas ya es otra cosa...
Cambiando de tema, ¿le gusta la música?
Casi toda, pero no puedo con el bum,bum,bum. Siempre me ha gustadomuchísimo Xabier Lete, que murió hace poco, Benito Lertxundi,Antton Valverde, Mikel Laboa... mi grupo mítico en la época eraItoiz, y me hicieron una buena faena al disolverse. Hace pocohe descubierto a Eñaut Elorrieta, el cantante de Ken Zazpi, yme parece muy bueno. Ramón Marticorena también me parece un tíofantástico. Hace poco estuve en su casa, en Urepel, y ese esun sitio donde me iría a vivir, directamente. Sigue siendo laNavarra antigua nuestra, la de nuestros sueños... bueno, o almenos para algunos, porque el antiguo Reino de Navarra para míes un sueño. Me encantaría verlo, pero con estos políticos tanmajos que tenemos no se sabe.
No parece una realidad cercana...
No lo sé. Las tendencias políticas tardan un tiempo, pero a veces,no se sabe ni por qué, cambian. ¿Por qué los del PSOE navarrodejaron de llevar la ikurriña? Yo he visto en el 78 cómo ibanpor la calle con la ikurriña, pero se fueron españolizando yen pocos años cambió todo. ¿Quién te dice que eso no puede sucederal revés? Y la política navarra depende del PSOE, es así. Estánlos de un lado, los del otro y ellos, que no saben ni lo quehacen.
Por lo que cuenta, no se le ve demasiada sintonía con los representantespolíticos
Es la historia de siempre. Los de abajo hacen la revolución paraquitar a los de arriba, pero cuando llegan arriba hacen lo mismoque han hecho sus predecesores, y entonces todo vuelve a serexactamente igual. El hombre es así de cabrón. No puede tenerpoder ni dinero porque se corrompe. Al final todo el mundo cae,solo que a algunos les cuesta cinco minutos y a otros cinco años.
¿Y no habrá algún político íntegro?
Con integridad total yo creo que no, porque por simple amiguismote perviertes. Si sale algo, ¿por qué no se lo vas a dar a tuamigo tal o cuál, que es un tío que lo hace bien y responsable?Por un lado, hay cosas comprensibles hasta cierto punto. Lo queno es comprensible, por ejemplo, es lo de Valencia. Eso es unescándalo. Y lo que tampoco es compresible son las millonadasque cuesta el tren de alta velocidad, ni que seamos los que máskilómetros de vías tengamos de toda Europa. Que pase un AVE allado de Gorriti, el pueblo de mi abuelo, es ridículo. ¿A quiénse le ocurre? Los políticos lo quieren para meterese en el bolsillotodas esas comisiones. Es una vergüenza. Solo piensan en su vida,en su futuro. Son así. Igual la gente de izquierdas no es tantoasí, pero también está el ejemplo de los que empiezan en sindicatos...Yo no domino mucho los entresijos de la política, pero no entiendocómo un sindicato puede defender los derechos de los trabajadoressi lo paga el Gobierno. ¿Cómo vas a morder la mano de tu amo?Eso es imposible.
Usted es su propio amo, y en su faceta de empresario, ademásdel gimnasio organiza veladas.
Sí, y la próxima es en Irurtzun el 18 de febrero, con el regresode Rubén Díaz, que es un pedazo de boxeador, el mejor que hahabido en la historia de Navarra. Ha estado parado 3 años portemas de contratos, y ahora arranca otra vez. Su carrera es unade las cosas que más me ilusiona ahora mismo, y tengo más confianzaen él que él mismo, porque de fuera se ven mejor las cosas. Loveo clarísimo, pero él lógicamente tiene sus dudas, porque esel que se sube al ring, y lo entiendo perfectamente.
Su hijo Aitor es otro con una carrera que le ilusionará...
Por supuesto. Claro que Aitor tiene ya su vida muy encarrilada.Está acabando el doctorado de ingeniería, y ahora mismo no séni de qué, porque ha hecho tantos másters y tantas cosas queme lío. Yo tuve solo el deporte. Hice COU porque me obligó mimadre. Ella quería que fuera ingenerio, y le dije que no, quefuera mi otro hermano. Lo mío ha sido siempre el deporte, desdepequeño. Y Aitor tiene además estudios, y es mucho mejor así.