El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha sugerido este miércoles la posibilidad de limitar la exportación de grano desde Ucrania hacia los países europeos y ha adelantado que discutirá este asunto con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, que ha ejercido labores de mediación desde el estallido de la guerra el 24 de febrero.

"Quizá deberíamos pensar sobre limitar la exportación de grano y otros alimentos en esta ruta (entre Ucrania y Europa)", ha defendido Putin. "Lo consultaré con el presidente Erdogan. Después de todo, fue el que trabajó por el mecanismo de exportación de grano ucraniano (tras la reapertura y reactivación de puertos de Ucrania cerrados a causa de la invasión rusa)", ha sostenido.

Asimismo, Putin ha reconocido que algunos sectores de la economía rusa están atravesando problemas, si bien ha hecho hincapié en que "en general, la situación económica se ha estabilizado". "Vemos problemas en algunas industrias y regiones, en empresas del país, especialmente las que están vinculadas a los suministros a Europa o que recibían productos de allí", ha explicado.

El mandatario ruso ha afirmado además que la inflación en Rusia está descendiendo y ha subrayado que espera que la cifra ronde el doce por ciento a finales de año, al tiempo que ha criticado las "acciones cortoplacistas de las autoridades occidentales", a las que ha acusado de "provocar una inflación global que ya ha superado récords en economías desarrolladas".

"A finales de julio, la inflación en Estados Unidos era del 8,5 por ciento. Ahora la tenemos en torno al catorce por ciento y poco, pero la tendencia, al contrario que en las economías occidentales, es de descenso. Allí va a aumentar, pero en nuestro caso va a descender", ha destacado Putin, tal y como ha recogido la agencia rusa de noticias TASS.

En esta línea, ha recalcado que espera que la inflación se sitúe en Rusia en torno al cuatro por ciento a principios de 2023. "Según muchos de nuestros expertos, en el primer trimestre o el segundo semestre del año que viene estaremos posiblemente entre el cinco y el seis por ciento, aunque algunos dicen que se llegará al cuatro por ciento. Veamos, en cualquier caso, tendencias positivas", ha manifestado.

Por otra parte, el presidente ruso ha señalado que el nicho de empresas europeas impactadas por las sanciones impuestas a Moscú podría ser llenado por compañías estadounidenses. "No sería sorprendente que, como resultado, el niño de empresas europeas en el continente y el mercado global sea ocupado por sus patrones estadounidenses. Al buscar sus intereses nunca se limitan y no dudan para lograr su objetivo", ha zanjado.