cadreita o Cintruénigo son algunas de las localidades riberas que han celebrado este fin de semana la festividad de San Antón. En Buñuel, con el lanzamiento del cohete desde el balcón de las escuelas viejas comenzaron el jueves las fiestas de invierno que se prolongaron hasta el domingo. La climatología adversa dio una tregua tras prender la mecha del cohete, que este año corrió a cargo de Jesús Yoldi, máximo representante de Cruz Roja en Buñuel, y los asistentes acudieron a la parroquia para el tradicional reparto de pan (100 barras) y queso (120 kilos) que se realiza a la salida de las vísperas. A continuación se prendió la primera hoguera de las fiestas y se repartió vino y caldo. El viernes se celebró la procesión en honor del patrón en cuyo recorrido se bendijo a los animales que fueron acercados por sus dueños al paso del santo para, por la tarde, disfrutar de unos partidos de pelota mano. Por la noche se quemó una colección especial de fuegos artificiales con música, reparto de vino, chistorra, toro de fuego y traca final. Los actos continuaron el sábado con concurso de ranchos, la tercera hoguera y reparto de chistorra y vino y el domingo con una multitudinaria comida popular en la que se ofreció paella y ensalada por 2 euros.
En Cintruénigo numerosas personas se desplazaron hasta la ermita de la Purísima para la bendición de los animales. Aunque la mayoría de las mascotas eran perros, hubo también pájaros, tortugas y conejos. Tras la bendición, dueños y sus mascotas dieron las tres vueltas alrededor de la columna de este santo. Cadreita también ha celebrado sus fiestas de San Antón durante el fin de semana. El viernes por la mañana se celebró la procesión y por la noche se encendió una hoguera en el ayuntamiento, después de realizar la tradicional bendición de los animales. La brigada municipal hizo reparto de tostadas de las que preparó 1.500 asadas a la brasa para untar con aceite y ajo y también se repartieron 800 pinchos de queso y membrillo y 900 bolsitas con nueces. El domingo se celebró en Murchante y se bendijo a los animales. Además, la cofradía de la Tostada del Ajo repartió más de 400 tostadas, mistela, vino dulce y pastas entre todos los asistentes.