Casi cuatro años han pasado desde que en julio de 2014 el Manantial de Arteta cerrara sus puertas al público debido al riesgo de desprendimientos. Del mismo modo, quedaron suspendidas las visitas a las Saleras de Arteta y también las actividades en el Centro de Información y Educación Ambiental. El pasado miércoles, tras una larga espera y lucha, el manantial vuelve a abrir sus puertas para vecinos del valle y visitantes. La celebración de la reapertura tuvo lugar tras la finalización de las obras que se han realizado desde el pasado mes de enero. Vecinos y vecinas del valle fueron los protagonistas como invitados a este acto tan especial. El proyecto de rehabilitación ha consistido en asegurar la ladera derecha que acota todo el espacio circundante debido al riesgo de desprendimientos. Estas obras incluyen la instalación de tres barreras dinámicas para sujetar las piedras que puedan desprenderse. Dichas barreras, dispuestas en tres niveles diferentes, están integradas por una malla de red de anillos de acero galvanizado sujeta por postes del mismo material que han sido anclados al monte y que cuentan con una doble sujeción mediante cables de acero. El proceso ha sido largo pero el futuro es prometedor. Con estas nuevas medidas la seguridad es óptima para poder volver a disfrutar de este entorno natural que ofrece el paisaje navarro.

historia A finales del siglo XIX, el agua que se abastecía a a la comarca de Pamplona no era suficiente debido a la superpoblación de los más de 30.000 habitantes de la zona. Desesperados en su intento de tener agua potable para su consumo diario, vieron la necesidad de explotar más recursos para este fin. El descubrimiento de Arteta en 1985 supuso la llegada del agua a los hogares y puso fin al problema de abastecimiento que había en aquel momento. Desde entonces, las aguas de Arteta siguen siendo las encargadas de abastecer la Comarca y también hacen de alimento para la regata de Urdabe y producir energía hidroeléctrica.

un entorno natural El Manantial está situado en el Valle de Ollo, a 30 km de Pamplona, y se trata de una de las salidas naturales del acuífero del interior de la Sierra de Andía. Es una de las dos fuentes de agua potable que se distribuyen a la comarca junto con el embalse de Eugui. El paisaje actual es el de una meseta caliza de unos mil metros de altitud con abundantes salidas de agua y formas típicas del relieve kárstico como dolimas, simas y lapiaces. En este espacio tan reducido, el manantial, las saleras y el barranco de Artazul constituyen un ejemplo de la acción del agua y el tiempo sobre las rocas y la presencia humana que aprovecha los recursos de modo respetuoso con el medio ambiente.

Una de las novedades de la reapertura de Arteta ha sido la renovación y remodelación del espacio dedicado al Centro de Información y Educación Ambiental de las Aguas Subterráneas. Constituye un espacio de formación y educación para niños, jóvenes y adultos que quieran conocer algo más la historia del agua que bebemos. Durante millones de años, el agua de lluvia ha agrietado y disuelto la roca caliza de la sierra y se ha filtrado en su interior formando un entramado de grietas, galerías y cuevas que forman un gran acuífero. Millones de años antes, el mar cubrió toda esa zona. Por eso, el centro está dedicado a esta larga e interesante historia geográfica. El centro ya se encuentra abierto al público y cuenta con recursos renovados como una exposición donde se pueden observar las características geológicas de este espacio que incluye maquetas, paneles y animaciones digitales. Otra novedad será la proyección de una pequeña pieza audiovisual que recoge testimonios de vecinos del valle que en su día formaron parte del equipo de trabajo del manantial o que tuvieron una estrecha relación con esta fuente de abastecimiento. Otra de las acciones novedosas ha sido adaptación de las medidas de accesibilidad física, sensorial y cognitiva. Así, las personas con dificultad visual cuentan con materiales como el braille, maquetas palpables y para aquellos con dificultades auditivas hay textos de paneles en formato bucle de inducción magnética. Para aquellas personas con problemas de comprensión lectora está toda la exposición en formato de lectura fácil. Además de estas novedades, en el manantial se pueden disfrutar de otras actividades como itinerarios guiados por el entorno y actividades como el pediluvio o el taller de sales de baño en las saleras.