Tienen perfiles diferentes. Sus edades también lo son, entre 27 y 53 años, y las tres han transitado por caminos vitales y profesionales muy distintos hasta converger en un proyecto de emprendimiento para el que fueron seleccionadas en 2019 por el valor diferencial y las posibilidades que presentaban sus propuestas. Terminado el periodo de formación, Carolina Seriola, Arantxa Berruete y Tamara Hurtado se encuentran en el momento decisivo, a punto de poner en marcha sus respectivos proyectos y de conocer de verdad si el mercado, de aquí o de fuera, les ofrece una oportunidad para seguir adelante.

Las tres emprendedoras se reunieron esta semana para poner en común sus experiencias como integrantes de la iniciativa Pamplona Emprende, impulsada por el Ayuntamiento y el Centro Europeo de Empresas e Innovación de Navarra (CEIN) para promover las industrias creativas y digitales y de innovación social. Después 4 meses y 300 horas de formación en distintas áreas -imprescindible para poner en marcha una idea de negocio- reconocen la importancia de lo que han aprendido. “Tengo que agradecer enormemente a CEIN, que a través de este curso me ha brindado herramientas claves para poner en marcha el proyecto. Se me ha abierto una ventana al mundo”, aseguró Carolina. Tamara, la más joven, comentó que lo más trascendental ha sido “centrar y definir el producto. Hasta ahora teníamos muchas cosas en la cabeza y este curso nos ha permitido concretar la idea de negocio y la forma correcta de desarrollarlo”. Arantxa, por su parte, destacó que este curso les ha ofrecido “una oportunidad de emprendimiento para este proyecto y para el futuro”.

Creación de retratos a medio camino entre la pintura y la fotografía: Arantxa Berruete y Antonio Chiorazzo crean obras fotográficas sobre papel de algodón

La pamplonesa Arantxa Berruete y el italiano Antonio Chiorazzo crean obras fotográficas de gran formato impresas sobre un papel de algodón con certificación de alta calidad y durabilidad. Se conocieron en Florencia trabajando en un estudio de arquitectura y tras un periplo que les llevó por Milán y Londres, el año pasado tuvieron conocimiento de la existencia del programa para emprendedores del Ayuntamiento y CEIN, que encajaba a la perfección con el proyecto que llevaban tiempo madurando.

En sus creaciones utilizan la fotografía para retratar con gusto pictórico, cuidando el detalle, la luz, los colores, el acabado y la expresión de la persona retratada del mismo modo que hacían los antiguos pintores retratistas.

A mitad de camino entre la pintura y la fotografía, “queremos volver a poner en contacto a la persona con un objeto real, tangible, por lo que entregamos la obra únicamente impresa y al final del proceso destruimos el archivo digital. Así conseguiremos que la obra no sólo será personalizada, sino, además, será única, y esto le otorgará un mayor valor”.

Tienen previsto darse a conocer a través de una exposición que están preparando donde el público pueda conocer de cerca su artesanía digital impresa.

“Mis tejidos son amor en estado puro, cada punto es un latido”: Carolina Seriola va a presentar una colección completa de artículos elaborados con ganchillo

Carolina Seriola se define como una apasionada del crochet, “el ganchillo de siempre, técnica que aprendí de mi abuela. Siempre he estado vinculada a los hilos, la costura, las transformaciones de ropa y los diseños. En 2002 tuve la posibilidad de coger en traspaso una mercería, convencí a una amiga, y nos lanzamos. 18 años después, con todo lo aprendido, es el momento de dedicarme al diseño y creación de prendas en crochet”.

Asume que se encuentra en el momento crucial, cuando “hay que poner en marcha muchos temas diferentes, pero es lo que toca cuando decides emprender, y se trabaja con mucha ilusión, queriendo hacer de un sueño una forma de vida”.

Está a punto de terminar su primera colección completa de artículos como echarpes, chales, toquillas o cuellos, todo confeccionado con materiales naturales como la lana y el algodón, pero con diseños y coloridos actuales, prendas atemporales. “Pienso que pueden encajar tanto a gente joven como más madura, que nos trasladan a la manera de trabajar de nuestras abuelas, que transmiten ternura, sensibilidad y serenidad, como el abrazo de una abuela. Por eso digo que mis tejidos son amor en estado puro, cada punto es un latido”.

Educar con el arte: bailando los colores o pintando los sonidos: Tamara Hurtado plantea una línea educativa a través de las artes colaborativas

A sus 27 años, la burladesa Tamara Hurtado fue una de las benjamines del programa de emprendedores. Bailarina y pedagoga de la danza, dice que su “objetivo es reivindicar el papel fundamental del arte en nuestra vida, como fuente para el desarrollo personal”.

Para fomentar la creatividad ha desarrollado la metodología ART·IN, “una línea de educación a través de las artes colaborativas. Es decir, nos servimos de los recursos de diferentes disciplinar artísticas para que el participante desarrolle su creatividad desde diferentes puntos de vista y así descubra sus talentos”.

ART·IN se puede desarrollar en centros educativos y culturales en formato de talleres anuales con sesiones semanales y en formato intensivo de 2 semanas para los periodos vacacionales.

Tamara Hurtado es además fundadora y presidenta de Colectivo CreArte, un colectivo que establece conexiones entre artistas, para que realicen proyectos multidisciplinares en colaboración y que acerca el arte a la comunidad haciéndola partícipe.

En su primer proyecto, Argo Navis, han colaborado artistas del mundo de la danza, el teatro, el diseño y las artes plásticas. Fue galardonada en octubre con un segundo premio en Los Encuentros de Arte Joven 2019.