El Defensor del Pueblo de Navarra ha dado la razón al barrio de la Txantrea y sugiere al Ayuntamiento de Pamplona que, "en relación con la implantación de la zona de estacionamiento limitado en el barrio, se desarrolle un proceso participativo, de tal modo que todos los interesados, vecinos comerciantes, otros colectivos...) puedan, previa la correspondiente y completa información, expresar con plenitud sus inquietudes, observaciones, alegaciones, alternativas, etcétera y, ponderando todos los intereses, se adopte la decisión que corresponda".

Francisco Javier Enériz responde así a la queja de la Txantrea, presentada el pasado 9 de julio, junto con 4.389 firmas de vecinos. En las quejas "se venía a expresar la disconformidad con la decisión municipal" y se consideraba "que se había adoptado sin contar con los interesados, sin informarles debidamente y sin permitirles participar en dicha decisión".

El Defensor considera que la decisión objeto de la queja "deriva del ejercicio de una potestad (la regulación del tráfico y de la movilidad urbana) en la que concurre un elevado márgen de discrecionalidad", siendo "legalmente válidas diferentes alternativas", por lo que sería importante en este caso activar "los mecanismos de información y participación ciudadana", en cuanto "permiten tomar en consideración y ponderar el conjunto de intereses afectados y analizar los distintos criterios y opciones que puedan plantearse por los ciudadanos".

Cabría esperar que ahora el equipo de Navarra Suma atienda los planteamientos del Defensor del Pueblo y posponga la implantación de la zona azul prevista para el 1 de septiembre, una vez que, recientemente, aprobó en pleno un cambio de normativa sobre apartamentos turísticos, atendiendo, según alegaban, a la sugerencia del Defensor, y de que, también hace poco, el equipo de Enrique Maya haya anunciado un proceso participativo sobre los parterres de Pío XII.