Ayer se conoció la sentencia de la Audiencia Provincial sobre la propiedad de Muskilda en Otsagabia, y fue un " un jarro de agua fría", que cayó sobre la localidad según expresaba su alcalde, Mikel Aoiz.

"La podíamos esperar, dado el fallo similar sobre las ermitas de Sangüesa y el dinero y poder que tiene esta", añadió.

Sin embargo, el primer edil significó que había "una pequeña esperanza" dada la peculiaridad de gestión de Nuestra Señora de Muskilda, por medio de un patronato (formado libremente por el Ayuntamiento, cura y mayordomo) que históricamente se ha ocupado de ella y sufragado todos sus gastos.

"El pueblo ha administrado Muskilda y la ha rehabilitado siempre que ha sido necesario. Sus habitantes han colaborado y todo lo relativo a ella se ha costeado desde el patronato. Este a su vez paga a la Serora (o cuidadora) y se nutre del dinero de sus cofrades, argumentó. Cada año, un mayordomo o mayordoma de forma voluntaria administra sus bienes . "Entendemos que nos la han quitado", lamenta el alcalde.

Aún con todo, la sentencia sostiene que el patronato no es dueño y otorga a la iglesia además de la ermita, la casa habitación, construida por el pueblo, y cinco campos, "amparándose en la base del derecho medieval", constata el alcalde y presidente del Patronato, Mikel Aoiz.

En los próximos días la letrada que representa al Ayuntamiento, Ana Clara Villanueva, analizará la sentencia y el pueblo se reunirá para decidir si recurren ante el TSJN. "Seguiremos adelante hasta donde haga falta. Será con esfuerzo y dinero, pero no nos rendiremos", sentenció el alcalde.-