Debido a los últimos datos de la pandemia, el ayuntamiento decidió finalmente, al igual que el año pasado, no celebrar los concursos de olentzero (tradición que comenzó en 1945) y belenes. Eso no desanimó a varias cuadrillas de diversas edades, que olentzero al hombro, cantaron y pusieron ambiente por las calles de la localidad y también en los barrios de caseríos, tanto por la mañana como por la tarde.