Uno de los móviles sustraídos en fiestas de Tudela ha sido detectado en Barcelona tras haber realizado diversos cargos en las cuentas corrientes de su propietario. Así lo ha anunciado la Policía Nacional para recalvcar la importancia de las medidas de seguridad en estos disoisitivos ya que “es muy importante configurarlos bien para que no se puedan usar de esta manera o denucniarlo de forma inmediata para poder borrar la posibilidad del uso de las tarjetas en os móviles”. De hecho el uso ha sido muy rápido ya que el lunes fue sustraído en Tudela y el miércoles ya estaba siendo usado en Barcelona. Desde la Policía Foral confirmaron estos extremos y añadieron que en el día de ayer (26 de julio) se han seguido presentando denuncias por el robo de móviles el primer día de fiestas. En total la cifra de denuncias supera las 60 si bien es cierto que muchos se presentan como robos “al descuido” si bien finalmente aparecen y resulta que se habían extraviado. Además han señalado que ayer pudieron descubrir un intento de transferencia en una caja de ahorros de 2.900 euros que se iba a realizar con uno de los móviles robados en estos días. A este respecto han indicado que el 80% de los móviles robados pertenecían a mujeres.

Desde Policía Foral han destacado la buena colaboración que se está produciendo entre ambos cuerpos “lo que a nivel práctico redunda en que trabajemos todos en mejores condiciones y un servicio más eficaz”.

Con respecto a las intervenciones hay poco que destacar más allá de más de 300 controles de alcoholemia que ninugno dio positivo y la detención de 4 personas por llevar en el coche una cantidad de speed como para vender en Tudela.

La Policia Municipal, por su parte, asistieron a una vecina de Tudela que comunicó el día 26 de julio que había sufrido amenazas de muerte por parte de un familiar con el que convive, comunicando su intención de presentar denuncia. Los agentes procedieron a la identificación de ambos implicados, marchándose voluntariamente del domicilio el supuesto autor de las amenazas. Asimismo también ayudaron a una mujer que se había atragantado en un restaurante de la calle paseo de Pamplona pero que se recuperó y no necesitó ser trasladada.