El miércoles por la mañana tuvo lugar, en el Monte Plano de Tafalla, una destacada iniciativa en pro de la biodiversidad y el hábitat de la fauna gracias a la labor conjunta de la Asociación "En Defensa de Nuestro Término de Tafalla", los colegios Escolapios y Marqués de la Real Defensa, el personal del centro Tasubinsa, el Departamento Agrario del IES Ribera del Arga Especialidad Agroecológica y valiosos voluntarios, incluyendo padres y madres de los estudiantes.

Durante el día, se llevaron a cabo labores de plantación y riego de nuevas especies vegetales, así como la siembra de un terreno con el noble propósito de fomentar la diversidad de la flora y fauna de la región. Además de estas actividades esenciales, los participantes tuvieron el privilegio de visitar una balsa de agua especialmente diseñada para proveer un recurso vital a la fauna local durante las temporadas más secas.

Ander Urkiaga, de los voluntarios de la Asociación, destacó la importancia de educar a las generaciones más jóvenes sobre la riqueza del entorno que nos rodea. "Es esencial que desde pequeños conozcamos y comprendamos nuestro entorno, para que podamos cuidarlo y preservarlo tanto para la fauna como para la flora que lo habita", subrayó.

escolares en el Monte Plano de Tafalla Cedida

La actividad también recibió la visita de representantes del Gobierno de Navarra, quienes respaldaron esta iniciativa de conservación hábitat para la fauna. Fermín Olave, Director del Servicio Forestal de Gobierno de Navarra, y Salomé Hernando, técnico forestal de Gobierno de Navarra, se unieron a la Directora General de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, Ana Bretaña. Esta última destacó la importancia de la educación ambiental y señaló la vital importancia de que las nuevas generaciones comprendan el medio ambiente y sepan cómo actuar para preservarlo pues, como destaco, “es uno de nuestros bienes más preciados”. “La intervención de esta jornada no ha sido únicamente una plantación en una balsa, sino que ha contribuido también a reforzar la vinculación simbólica, identitaria y emotiva de los escolares con su tierra y con su entorno natural más cercano. Además, la población escolar es un eslabón clave para reducir la brecha entre el mundo urbano y rural y trabajar en una cultura de respeto y diálogo con nuestro entorno natural”, exponía la Directora General de Medio Ambiente.