“I-E-Podemos no va a entrar al Gobierno ni a la Junta, pero sí hemos alcanzado un acuerdo. Los próximos 4 años habrá estabilidad”

Geroa Bai se ha quedado sin representación y no podrán revalidar el pacto de Gobierno de hace 4 años...

-Es una pena que no haya podido por lo menos repetir los resultados de hace 4 años. Esta legislatura, al igual que la pasada, EH Bildu no tiene mayoría. Pero entonces fuimos capaces de llegar a acuerdos con Geroa Bai, y en esta vamos a llegar a acuerdos con I-E-Podemos. En principio no van a entrar al gobierno ni a la junta de gobierno, pero sí hemos alcanzado un acuerdo de gobernabilidad. Habrá presupuestos y estabilidad los próximos cuatro años.

Iñaki Bernal ha señalado diferencias con su grupo, por ejemplo sobre el modelo territorial. ¿Será más difícil alcanzar acuerdos con I-E-Podemos que con Geroa Bai?

-Va a ser igual porque estamos tratando política municipalista. No hablamos de nada más por mucho que otros se empeñen en la ikurriña, el euskera y ETA. Ese no es nuestro terreno. La línea que va a seguir EH Bildu es la de trabajar día a día por la ciudadanía de Berriozar. Ahí vamos a encontrarnos en 99% de los casos con I-E-Podemos, y estoy convencido de que también vamos a llegar a acuerdos con el PSN.

Esos ‘otros’ a los que se refiere han doblado sus escaños. El portavoz de Navarra Suma anunció una “oposición constructiva”. ¿Qué espera usted?

-Espero la misma sintonía que en la pasada legislatura.

¿Ninguna?

-Efectivamente. Seguirán enrocados en su estrategia de euskera, ikurriña y ETA. Creo que deberían hacer más municipalismo y menos política de confrontación.

En el discurso de investidura dijo que no se ponen líneas rojas para trabajar.

-Tenemos un acuerdo con I-E-Podemos, pero ni pondremos líneas rojas ni vetos. Por encima de las siglas políticas están las personas, y esta Corporación puede hacer mucho por mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas. EH Bildu apoyará todo lo que sea bueno para el pueblo.

Repite como alcalde. La experiencia le resultará útil para la nueva legislatura...

-Desde luego que la experiencia es un grado. Y vamos a mantener la misma filosofía de trabajo. El Ayuntamiento y mi despacho están abiertos a la ciudadanía. Cualquier persona puede venir a proponer ideas o a resolver sus problemas. Esa apertura y cercanía es el modelo que ha salido recompensado en las elecciones.

¿Tiene ya definidas las áreas y el reparto de responsabilidades con su equipo?

-Estamos en ese proceso. Sí adelanto que vamos a dar un giro de 180 grados a las áreas, con un cambio sustancial. Las áreas se modernizan y se crean dos nuevas; la concejalía de Medioambiente y Cambio Climático, y la de Convivencia y Memoria Histórica.

Un área específica de Medioambiente y Cambio Climático ya es una declaración de intenciones.

-Sí. En la pasada legislatura Berriozar se sumó al Pacto de Alcaldías para reducir las emisiones de CO2. Estamos muy implicados y queremos profundizar en la materia. Ya hay una política de compra de vehículos exclusivamente eléctricos y de que todas las contrataciones eléctricas lo sean con energía verde. Pero sobre todo queremos concienciar a la ciudadanía sobre el cambio climático. Será un eje importante.

Ahí tienen un gran aliado con Traperos de Emaús, recién instalados en Berriozar.

-Desde luego, y tenemos que trabajar de la mano. Somos unos privilegiados por tener a los Traperos aquí. Ha sido la mejor noticia socioeconómica de Berriozar en los últimos años, y nos aporta muchísimo. Sobre todo por la cantidad de actividades que ofrecen, que hemos incorporado a nuestra agenda. Es una gozada que nuestra ciudadanía pueda disponer de esas actividades. Y están muy ligadas a nuestra forma de ser. Trabajan la economía circular, cómo combatir el cambio climático... la colaboración es fenomenal y coincidimos al 100%. Además, el hecho de que los sábados se celebre un mercado de segunda mano hace que mucha gente de Pamplona venga a Berriozar, con la repercusión que eso tiene para nuestra hostelería.

¿Y qué buscan con la concejalía de Memoria Histórica y Convivencia?

-Berriozar está muy ligado al fuerte Alfonso XII. En 2018, cuando celebramos el 80º aniversario de la fuga de Ezkaba, nos dimos cuenta de que la mayoría de los vecinos y vecinas no conocían qué había ocurrido aquí, en Berriozar. Eso nos hizo pensar. Tiene que ser una cuestión a la que se dé difusión desde el Ayuntamiento. Y la convivencia, en todos los sentidos. A nivel de pueblo, de relaciones entre distintas personas. Trabajar para que Berriozar, donde convivimos muchas nacionalidades, sea el pueblo de los 1.000 colores. Y que eso no se vea como algo extraño, sino como algo que nos enriquece y nos aporta.

¿Esta legislatura será la de la reurbanización definitiva de la Avenida Gipuzkoa?

-Sí. Vamos a trabajar para recuperarla, que deje de ser una avenida y se convierta en una calle más de Berriozar. Sin perder plazas de aparcamiento, pero que desaparezcan los semáforos y que sea mucho más amable para las personas.

¿En qué punto está el cambio de ubicación de la gasolinera y el del Carioca en viviendas?

-El Ayuntamiento ya hizo su proceso y ahora está en manos del Gobierno Foral, que tiene que autorizar el cambio de la gasolinera. Lo mismo con las viviendas del Hotel. El Ayuntamiento ya ha dado su visto bueno al proyecto y ahora esperamos a la licencia de obras. Es una intervención que va a provocar un cambio sustancial.

¿Qué más necesita Berriozar?

-La peatonalización de algunas zonas. Tenemos calles muy estrechas donde las personas mayores tienen dificultades, y ahí queremos incidir para mejorar su calidad de vida. En el campo de fútbol existe una demanda muy razonable para hacer unas gradas cubiertas. Y seguiremos trabajando para dotar de más servicios al Centro Municipal para personas mayores. Ha tenido muy buena acogida y hay demanda. La ciudadanía lo ha visto con buenos ojos y exige más servicios. Esos van a ser los ejes.

Y siempre quedará la protesta histórica para que desaparezca la vía del tren.

-La protesta seguirá. En ese caso siempre hemos coincidido todos los grupos, pero no está en nuestras manos. Nos preocupa el peligro que supone. Pero no solo eso. La vía parte a Berriozar en dos y no nos deja desarrollarnos. Siempre se habla de la ampliación de la piscina, pero no podemos hasta que no desaparezca la vía. Y nos limita porque hay empresas que quieren venir a Berriozar y no podemos ofrecerles espacio. Aquí también tienen mucha culpa los militares y su zona de seguridad, que no nos deja desarrollar el polígono. Deberían ir pensando en buscarse otro sitio. Berriozar crece y demanda. Y no podemos estar a expensas de una vía del tren o de los militares.