Hace algo más de un año, en junio de 2020, el Ayuntamiento de Barañáin desmanteló el parque infantil del Lago -uno de los más utilizados del municipio- para instalar una cubierta que parecía no llegar nunca. Una demanda histórica de vecinas y vecinos que se movilizaron en diferentes ocasiones para reclamar una solución, ya que después de haber pasado prácticamente un mes confinados en casa “los críos no han podido utilizar la zona de juegos más grande con la que cuenta Barañáin”, denunciaban.

El proyecto de la cubierta -la única con la que cuenta el municipio, donde existen actualmente seis parques, uno de ellos semicubierto- fue aprobado en pleno ya en diciembre de 2018. Posteriormente, en febrero de 2019, la obra se adjudicó por 296.652 euros (IVA excluido). Se trata de una estructura metálica revestida de madera decorativa y con una cubierta de paneles de policarbonato transparente, para garantizar la entrada de luz en el interior y con iluminación artificial que permite su uso durante todo el año.

Las obras para instalarla comenzaron en octubre de 2020 y la cubierta llegó por fin a principios de este año, pero sin el parque, que ha permanecido desmantelado en un cúmulo de retrasos que han sido también criticados por diferentes grupos en el Ayuntamiento. Y es que sin caballitos, toboganes, rampas, columpios ni mobiliario, la zona ha permanecido vallada todos estos meses, sin uso. Este martes, por fin, han comenzado a instalar los juegos.

“Goteras” en la cubierta

Un buen número de vecinos y vecinas han reclamado en varias ocasiones la reapertura del parque y han realizado varias concentraciones para pedir una solución ante algo que han calificado de “chapuza” . Hay quien no se fía porque ya antes de que comenzara la instalación de la cubierta, cuando se cerró el parque y se desmanteló, se quejaban de que el Ayuntamiento no se reunió con ellos para tratar el tema ni les informó de nada, no supieron si se iban a realizar las obras ni cuándo, denunciaron, a pesar de que se trata de una población que cuenta con muchísimos menores y el parque, en un entorno como el del Lago, es sin duda una de las ofertas de ocio más reclamadas.

“Es una vergüenza que hayan tenido que pasar más de trece meses para que vuelvan a abrir el parque, aunque habrá que ver cómo queda y si vamos a mojarnos cuando llueva, porque la cubierta ha dado muchos problemas”, señala Eneko, usuario y vecino de Barañáin. También Ane, otra vecina, ha mostrado sus reservas: “Es muy triste haber estado tanto tiempo sin parque en plena pandemia, que apenas teníamos opciones para los txikis. No sabemos si han reparado las filtraciones ni qué tipo de mobiliario van a poner, si es el más adecuado. A ver cuánto tardan en abrirlo”, valora.

El parque lleva cerca de 30 años formando parte de la estampa habitual en una zona en la que hay un espacio para el patinaje y las bicis, además de juegos para niños y niñas de diferentes edades. Tal y como valoran sus usuarios y usuarias, ofrece muchas alternativas “porque es un espacio en el que también puedes darte un paseo, ir a ver los patos o jugar con el balón. Además es más seguro que otros parques porque cuenta con una valla”. Sólo le faltaba la cubierta -aunque llegara con goteras- pero después de tanto tiempo esperando, por fin se ha comenzado a instalar ya el nuevo mobiliario.