Una orgía de gasoil y derrapes tuvo lugar este pasado puente en la Sierra de Lóquiz. Alrededor de un una veintena de vehículos todoterreno accedieron dos noches sucesivas a este espacio protegido. La primera la del sábado al domingo y lo mismo sucedió un día más tarde cuando, a partir de las 18 horas, accedieron a través del Valle de Lana hacia Lóquiz y allí permanecieron "por lo menos hasta las dos de la madrugada". Dos noches en las que la lluvia y a nieve hicieron las delicias de varios participantes en una fiesta nocturna en la que como resultado, quedaron destrozados varios caminos y praderas.

"Vergonzoso e inaceptable los daños que se han ocasionado este fin de semana en varios puntos de las Sierras de Lóquiz y Urbasa producidos en su mayoría por todoterrenos transitando y derrapando a grandes velocidades fuera de pista" comentó un vecino de Lana.

A falta de tasar los daños la sensación general en Lana y en los valles que forman parte de la sierra de Lóquiz, era de que los participantes habían actuado con impunidad y desatendiendo los daños que pudieran producir con sus vehículos.

Uno de los puntos más dañados fue el antiguo observatorio de incendios de Ulibarri, un lugar estratégico que hace unos años sirvió de punto de control del fuego en las campañas contra incendios de verano ya que desde ahí "se divisa todo Valdega, La Berrueza y parte de la Ribera". Otro de los parajes donde actuaron los participantes, fueron los corrales de Viloria desde donde ascendieron hacia la ermita de Santiago a 950 metros de altitud: el punto más elevado de la sierra de Lóquiz. "No sé ni quienes son ni si son conscientes de que esas pistas y estos espacios que destrozan son bienes comunales" comentó otro vecino del valle. Y es que, solo los daños de este fin de semana a falta de un peritaje más exhaustivo podrían rondar "los cinco o seis mil euros" solo en caminos.

El de sonido de los motores y sus luces, no pasó totalmente desapercibido, ya que se pudo ver a kilómetros de distancia. Desde Asarta (La Berrueza), "se veían las luces de los vehículos" aseguró un vecino de la localidad. También han aparecido imágenes de los actos en las diferentes redes sociales alguna de las cuales "ya ha sido borrada" nos comentaron ayer desde el Valle de Lana.

comunal La Junta de la Sierra de Santiago de Lóquiz es el organismo que gestiona este facero al que históricamente están vinculados 25 poblaciones de los valles de Améscoa Alta, Améscoa Baja, Valdega, Allín y Metauten. Cuenta con una longitud de unos 22 km y una superficie de 140 kilómetros cuadrados. Un vecino de una de las localidades que no quiso identificarse se dirigieron a los conductores anónimos autores de los daños. "Tienen que pensar que los daños que han causado deben ser reparados en gran parte con los escasos recursos públicos de todos los vecinos".