La mecha más 'rojilla'
Más nervioso que jugando un partido con Osasuna, Kike Barja tira el cohete de las fiestas de Noáin y pide a los vecinos que disfruten “con respeto y sin agresiones”
Faltaban 30 minutos para el Chupinazo cuando Amalur, Musa, Juglar y Bufón se han colocado en la explanada de la plaza de los Fueros de Noáin, frente al Ayuntamiento, a la espera de que sonara el cohete. Unos minutos después, los vecinos de la localidad se han contagiado de esa devoción que provocan las fiestas de su pueblo y se han reunido alrededor de los gigantes vestidos de blanco –con la música de la txaranga Turrutxiki de fondo– y se han emocionado al ver al chico que los más mayores vieron crecer y al que muchos jóvenes admiran: “¡Kike, Kike, Kike!”, le han jaleado los más pequeños. Esta mañana Kike Barja, jugador de Osasuna, ha sido el encargado de lanzar el cohete de Noáin, donde tan solo ha pedido una cosa: “Que seamos un ejemplo de cómo disfrutar de las fiestas; con respeto, convivencia y sin ningún tipo de agresión. Eskerrik asko, ondo pasa jaietan”, ha reivindicado en su discurso.
Ante estas palabras, se han encendido de nuevo los vítores que han coreado su nombre y que se han disipado cuando han escuchado a Barja decir: “Noaindarras, ¡viva San Miguel!, Gora San Miguel!”.
En cuanto ha sonado el cohete, los vecinos de la localidad se han colgado los pañuelos al cuello, han saltado y han celebrado el inicio de sus fiestas al ritmo de la txaranga. Del balcón del Ayuntamiento, como es costumbre, han empezado a caer caramelos y los críos se han abalanzado sobre ellos.
Mientras tanto, Kike Barja se ha alejado de la aglomeración para abrazar a sus amigos y familiares que le han acompañado en un día tan especial para él. “Esto es un momento único para cualquier vecino del pueblo. No es algo que puede decir todo el mundo y me ha hecho muy feliz”, ha asegurado. A pesar de los grandes logros que le hacen ser digno merecedor de tirar el Chupinazo, Barja no se lo creía cuando le comunicaron que iba a ser el lanzador del cohete: “Nunca pensé que sería una opción, así que he vivido unos meses muy bonitos . Hoy me he visto con más nervios que cuando juego un partido”, ha contado mientras sonreía. Sin embargo, Sebastián Marco, alcalde de Noáin, ha apuntado que la decisión fue por unanimidad: “En cuanto se propuso que fuera Kike quien abriera las fiestas, todos dijimos que sí. Ha hecho toda su vida aquí, es un hombre muy querido por todos y es un orgullo que siempre esté tan ligado con Noáin”.
Por otro lado, en su discurso también ha mencionado que había pasado unos meses muy difíciles, debido a su lesión de ligamento cruzado en la rodilla izquierda durante un duelo contra el Alavés. Actualmente, se encuentra en “la fase final. Poder estar hoy aquí junto a mis amigos y mi familia es un chute de energía que me va a animar a seguir para adelante”, ha confesado. Kike Barja ha vuelto a casa, donde a pesar de ser una estrella, todavía hay quienes le recuerdan como ese chico que creció con un balón en sus pies.
Unas fiestas seguras
Por su parte, Sebastián Marco ha comentado que a pesar de que a las fiestas de Noáin “siempre venga mucha gente”, sus objetivos fundamentales son la seguridad y el respeto. “Creemos haber preparado un buen dispositivo, pero no podemos bajar la guardia. Son muy recientes los hechos sucedidos en Elorz y hay que tener cuidado”, ha señalado.
La programación, que se ha valorado en un presupuesto de 170.000 euros, se mantiene con respecto a ediciones anteriores porque “hay que ajustarse a las necesidades de cada año. Sobre todo, destacan las actividades gastronómicas, donde nos reunimos todos, pero también hay zona joven, orquestas y vaquillas, que mueven a mucha gente”, ha mencionado. Asimismo, ha declarado que uno de los actos más esperados es la cabalgata joven, que se ha consolidado en la localidad y “somos conocidos por este desfile”.
Hyundai mobis en el cohete
Entre los asistentes del Chupinazo en el Ayuntamiento, se encontraba un grupo que, aunque nunca habían estado en las fiestas patronales de Navarra, se sentían bastante mimetizados con el entorno. Se trataban de varios de los miembros de la empresa coreana de baterías para coches eléctricos Hyundai Mobis, que generará alrededor de 400 puestos de trabajo para el Valle de Elorz. Inbo Jung —ha cambiado su nombre por Iván— ha reconocido en Noáin la esencia de Chuseok, el festival de Corea que se celebra hacia el equinoccio de otoño. Con todo, la atmósfera de Navarra es “maravillosa. La gente es muy buena y siempre se disfruta mucho”, ha explicado Iván.