- El festival Ortiga 2020 llega hoy al Gazteleku de Villava. Desde el área de Juventud del Ayuntamiento de Villava se ha puesto en marcha la segunda edición de este festival. El objetivo de esta iniciativa anual sirve para restaurar muros en mal estado o edificios con pintadas, es decir, se centra en recuperar espacios urbanos mediante el arte del grafiti.
Este año se celebrará el 26, 27 y 28 de junio en el edificio para jóvenes de Villava. La idea es restaurar todo el edificio a lo largo del fin de semana mientras se hace una demostración de cómo se estarán pintando estos grafitis. Asimismo, hoy se procederá a la presentación de la revista especializada en grafitis Yanollueve a las 17.00 horas y el sábado 27 desde las 11.00 a las 20.00 horas habrá un mercadillo donde se podrán adquirir productos diseñados y creados por escritores grafiti de la villa.
El proyecto surgió el año pasado cuando dos estudios de muralismo como ToboGang y Kánula Estudio decidieron unirse para restaurar muros degradados utilizando grafitis. Los escritores grafiteros de estos grupos se animaron a proponer esta idea de restauración al coordinador del área de Juventud del Ayuntamiento de Villava, Joseba Amigorena. Una vez tuvieron el visto bueno de los vecinos del barrio y de la Mancomunidad, en septiembre de 2019 se procedió a la primera restauración de un muro perteneciente a Arre, pero que estaba en muga con Villava localizado en el parque Ventorrillo.
Este año la idea es que los 12 participantes de los estudios creativos pinten todo el edificio del Gazteleku de Villava. Los diseños tendrán cierta libertad. "Un festival de grafiti lo que realmente hace es dar soporte a que nosotros pintemos un poco lo que queramos", explicó Carlos Almagro, uno de los escritores de grafiti del proyecto. Los grafiteros detallan que serán muy coloridos para que capten la atención de los jóvenes. Desde el Ayuntamiento les han marcado unas pautas para que los murales estén relacionados con la juventud, los deportes y los diferentes servicios que ofrecen en este espacio para jóvenes, como el skatepark.
Joseba Amigorena confirmó que, este festival, al ser una propuesta elaborada por el propio grupo de los artistas, hace que su coste sea más reducido que si se hubiese contratado de manera independiente por parte del Ayuntamiento. "Todo el proyecto con el material, los artistas y el andamiaje incluido ronda los 4.800 euros", corroboró el coordinador del área de Juventud.
El nombre del festival Ortiga está inspirado en la doble función que desempeña la propia planta, por un lado es un vegetal que pica y por otro lado está presente en remedios curativos naturales, puesto que tiene una vertiente medicinal. Los escritores de grafiti se sintieron identificados con esta planta, ya que ellos, los grafiteros, también son considerados, en ciertas ocasiones, como rebeldes, puesto que parte de la sociedad entiende el arte del grafiti como vandalismo. Con esta denominación intentaron plasmar esa doble función de la planta y que, a la vez, simbolizase cómo el grafismo también es otro tipo de arte.
El Estado de Alarma hizo que el propio centro de juventud tuviese que adaptarse, para ello utilizaron el espacio abierto donde colocaron mesas, una de ellas de ping-pong, para que los jóvenes tuviesen un lugar donde reunirse. El 1 de julio procederán a abrir el espacio de gaztegune y tienen un programa de actividades en agosto orientadas a adolescentes. Las salidas habituales a Portaventura y Aquopolis se han suspendido, pero este año en los meses de verano se harán tres excursiones propuestas por el Gobierno a lugares como la Foz de Arbayún o al pantano de Alloz.
