unque son días tristes en Marcilla tras la suspensión de las fiestas patronales siempre hay algún aliciente que hace seguir con optimismo hacia adelante y, en este caso, uno de ellos es saber que los gigantes Ana de Velasco y el coronel Villalba, que esta semana deberían animar las calles del casco urbano, tendrán muy pronto a su vera una nueva pareja de baile. Y es que la comparsa crece.

Genaro Echeverría se está encargado de confeccionar las cabezas de las dos nuevas figuras que, aunque la idea era haberlas dado a conocer estas fiestas, la presentación oficial tendrá que esperar. "Era mi ilusión, algo que quería hacer al jubilarme. Hablé con la comparsa y con el Ayuntamiento para saber si los querían y me dijeron que sí. Si me hubiesen dicho que no, creo que los habría hecho igualmente, aunque fueran solo para mí", comentaba alegre mostrando parte de su trabajo.

Y es que Genaro siempre ha estado vinculado al mundo de los gigantes puesto que en Peralta los bailó 19 años y en Marcilla, al menos cuatro. Además, recuerda con añoranza, "cuando inauguraron la pareja de Marcilla yo saqué el cabezudo del dragón".

"Está siendo una experiencia única, nunca había hecho algo similar y me estoy ayudando de tutoriales y hablando con gente que entiende", insistía.

Aunque los dos gigantes ya tienen nombre y apellido prefiere no desvelar el gran secreto que se esconde tras estas nuevas figuras. Lo que sí adelantaba es que serán personajes vinculados a la localidad.

A la hora de ponerse manos a la obra vio que algunas personas utilizaban arcilla, "pero yo me decanté por la plastilina para empezar a hacer las formas. Creo que hice y deshice unas 700 veces la plastilina", reía. Después vino el negativo con la escayola y el cartón: "Quería dos cabezas fuertes pero no conté con el peso".

De hecho, al principio hizo dos bustos que, al no quedar convencido del todo, terminará y regalará a los miembros de la comparsa para que los tengan de recuerdo. "Después de ver que no era lo que quería empecé de cero. Hay que estar contento con el resultado final porque es algo que va a perdurar en el tiempo", recalcaba.

El proceso sigue con el plaste, el lijado, "que es un trabajo muy duro", la imprimación y la pintura, para lo que cuenta con la ayuda de Gina.

El Ayuntamiento aprobó una partida en los presupuestos municipales de 10.000 euros gracias a la que comprarán las estructuras, mientras que los trajes, según apuntaba, los van a confeccionar Susi y Espe gracias a las telas que les han dado en la Lavandería Elis.

Con más de 30 años de andadura a sus espaldas la comparsa marcillesa puede presumir de seguir evolucionando. Y es que en la actualidad unas 12 personas forman parte de este grupo que, aunque empezó bailando al son de la charanga, ya es inseparable de los gaiteros.

"Aunque a veces puede ser duro el madrugón, merece la pena. En fiestas te levantas, te preparas, vas a la bajera de los gaiteros, almuerzas y haces el pasacalles. Se forma un gran ambiente", comentaban.

El grupo ensaya cuando se acercan las fechas clave, sobre todo de cara al verano, en el patio del castillo. De hecho, les gusta sacar un par de bailes nuevos cada año con los que deleitar a los vecinos en sus salidas por Marcilla. Además suelen desplazarse a otros municipios de la zona para participar en concentraciones.

Ahora, con las nuevas figuras, explican, "la comparsa estará completa y tendremos que adaptar los bailes, pero hay gente de sobra para rotar. Estamos muy ilusionados y, si alguien más quiere formar parte de esta familia, será más que bienvenido".