Aunque es un tema que viene de lejos, Upei y Navarra Suma en Peralta han vuelto a mostrar sus diferencias en cuanto a la colocación de cámaras de seguridad en el casco urbano; su utilidad y funcionalidad. De esta manera, mientras el alcalde, Juan Carlos Castillo, destaca “el nivel de seguridad que aportan a la localidad”, para la oposición, el hecho de instalar más cámaras “solo responde a un afán recaudatorio”.

De acuerdo con Castillo, estos aparatos “han contribuido a resolver 54 infracciones y delitos, de los que destacan 14 robos, 11 daños a bienes, 8 vertidos sin permiso y 3 sanciones por no recoger las heces del perro, entre otras. Además, el tráfico es más seguro y se ha reducido el número de accidentes exponencialmente”.

El alcalde insiste en que las cámaras que se han instalado han sido propuestas por Policía Municipal y “con una explicación lógica para dar más seguridad a la ciudadanía y a los bienes, en ningún caso con afán recaudatorio”. De hecho, recalca, “son varios los vecinos que nos solicitan la instalación de cámaras en sus calles”.

Sin embargo, para Navarra Suma “el tráfico en Peralta no justifica el gasto de más de 70.000 euros en unas cámaras que incomodan a los vecinos que las sufren, y que, bajo el paraguas de la seguridad, solo tienen un afán recaudatorio por la vía de las multas”.

Castillo insiste y aclara que “tratamos de evitar accidentes, atropellos, es decir tratamos de dar protección y seguridad a los peatones, principalmente, y ello más la resolución de varias infracciones, como robos, daños a personas y bienes, etc. Entendemos que justifica la inversión”.

Y para terminar recuerda que siguen con el compromiso de realizar una consulta ciudadana sobre las cámaras. “Que todavía no la hayamos hecho no quiere decir que hayamos incumplido nada, entre otras cosas, porque tampoco dijimos en qué momento se haría, y si bien es cierto que nuestra intención era haberla hecho ya, la pandemia nos ha obligado a centrarnos y a priorizar otras cuestiones”.