El Ayuntamiento de Azagra de está un paso más cerca de conseguir un centro rural de atención diurna, uno de los proyectos más ansiados en el municipio y para el que ya han encontrado ubicación. Y es que, explicaba el alcalde Rubén Medrano, en el pleno celebrado la pasada semana aprobaron por unanimidad una modificación presupuestaria con cargo al remanente de 585.000 euros para comprar una parcela de 6.000 metros cuadrados en el casco urbano en la que levantarán este inmueble y en la que, además, trasladarán el hogar del jubilado.
El solar se encuentra en la zona de la Badina, donde colocan la plaza de toros portátil, y la idea es utilizar 2.000 metros cuadrados para este proyecto y que el resto del suelo se pueda utilizar en un futuro para habilitar otras infraestructuras como, por ejemplo, un espacio escénico.
“Para mí es un orgullo ir dando pasos hacia este objetivo. Con esta compra logramos una gran zona de suelo dotacional”, apuntaba Medrano que insistía en que era algo en lo que llevaban meses trabajando pero que “no podíamos avanzar hacia ningún lado sin contar con una parcela”.
Aunque aún tienen que definir las características, en principio tendrá 30 plazas, será un edificio accesible de una planta aunque puede que construyan el armazón para un futuro primer piso, y estará adaptado a las necesidades de Azagra, no será algo desorbitado; acogerá diversas actividades, fisioterapia, talleres de memoria y psicomotricidad, entre otros, con el objetivo de alargar la vida activa de los vecinos.
El hogar del jubilado, por su parte, contará con su bar y servirá como lugar de reunión y de encuentro. Y es que hay que recordar que ahora los jubilados están en un local de la parroquia y, desde que arrancó la legislatura recuerda Medrano, el Ayuntamiento asume el alquiler mensual que ronda los 1.200 euros.
Una prioridad
Para el alcalde, “esto es, sin duda, una prioridad. En su día mantuvimos una reunión con expertos del departamento del Gobierno y nos dijeron que una residencia era inviable y nos recomendaron este tipo de instalación. Creo que es algo necesario, pero no de ahora, sino de un tiempo a esta parte. Está claro que será, sin ninguna duda, el proyecto estrella, pero ya no mío a nivel personal sino para todo el pueblo”.
Con el plan de viabilidad ya listo, ahora están con los trámites pertinentes para sacar a licitación de forma inminente la redacción del proyecto, valorado en unos 100.000 euros, con el objetivo de que en 2023 pueda comenzar a utilizarse; “no estamos especulando, queremos hacerlo ya”.
La inversión total, incluyendo el suelo, el proyecto y la ejecución, ronda los 2.5 millones de euros y esperan contar con alguna subvención. Eso sí, tienen claro que solicitarán financiación externa. “Para mí es muy emocionante porque, además de dar solución a un problema que viene de atrás, estamos comprando futuro; solucionas una necesidad acuciante y actual y dejas metros para futuras mejoras”.
