on el paso del tiempo toca adaptarse, renovarse y afrontar los cambios con ilusión. El programa En Buena Compañía, que nació con el fin de atender, socializar y visibilizar a las personas del municipio que presentan alguna discapacidad o que se encuentran en situación de dependencia, está inmerso en un momento de cambio que requiere de la implicación de la ciudadanía. Y es que, aunque los talleres tenían que haber arrancado en septiembre no ha sido así: Anfas, entidad que ahora gestiona la iniciativa, está inmersa en el proceso de selección de una persona responsable después de que Ana Ochoa, la encargada hasta el momento, haya tenido que dar un paso a un lado. En Buena Compañía, además, requiere de savia nueva, de voluntarios jóvenes que quieran aportar su granito de arena a la causa.

En el mes de junio Ochoa, tras el viaje a Basabere, dejó la coordinación "básicamente por falta de tiempo, pero esto no quiere decir que me vaya a desvincular del grupo. Sigo como voluntaria y me tendrán ahí siempre que me necesiten".

De hecho, tanto es así que durante estos meses ha seguido al pie del cañón con los siete vecinos que forman parte del proyecto siempre que le han llamado. Es más, en septiembre el Club de Senderismo, Montaña y Marcha Nórdica les invitó a colaborar en la prueba que celebraron en la localidad ribera; además de encargarse del avituallamiento durante el recorrido, entregaron los premios a los ganadores. Con ellos, además, fueron a las instalaciones de Lacturale en octubre.

Por otro lado, en diciembre participaron en el torneo de la Escuela Ribera de Fútbol; hicieron el saque de honor y disfrutaron de un refresco y un pincho. Además, Ana asegura que también quedará en enero con ellos para realizar una hoguera por San Antón, "pero ya no como actividad del programa, sino como amigos, como cuadrilla".

Y es que Ochoa espera que en enero "arranque con normalidad el programa, con una nueva responsable, y que vuelvan a realizar actividades tres sábados al mes. A todos los que me preguntan les digo que es un programa muy bonito, enriquecedor y que inviertes tu tiempo, que no cuesta nada, en intentar que otras personas disfruten de su ocio. Es algo muy satisfactorio; son parte de mi familia y no es nada lo que puede parecer que yo les aporto a ellos, para lo que ellos me aportan a mí".

El curso pasado, insiste, lo acabaron muy pocos voluntarios, sobre todo de cara a organizar actividades en el exterior, por lo que hace un llamamiento a que "la gente que quiera seguir con el proyecto y tenga ilusión y ganas de pasarlo bien, que se anime, que va a conocer a gente encantadora". Para ello, eso sí, hay que ser mayor de 16 años y los interesados reciben una formación concreta en voluntariado; "es algo muy bonito, es cierto que los jóvenes quieren salir y aprovechar su tiempo libre pero, de verdad, hay tiempo para todo".

Por último, recuerda, el Ayuntamiento hizo un concurso fotográfico con motivo del 8-M y presentaron ocho imágenes de las integrantes del programa en varias situaciones cotidianas y mostrando a mujeres empoderadas; con esas instantáneas ganaron un premio gracias al que, insiste, a finales de marzo van a ir a Tierra Rapaz, en Calahorra. "No suelen salir y cuando les dices que van a ir de excursión, bien sea al cine, a dar un paso, o que se van a montar en un autobús para ir a otro sitio les das las vida, es una pasada la ilusión que les hace".

El programa, con sus altibajos, seguirá, "no se puede perder, es el único ocio que tienen. Son personas que forman parte de la sociedad y tienen el mismo derecho a disfrutar que el resto de nosotros. Ahora mismo están venga preguntar cuándo retoman sus actividades porque, aunque muchos son autónomos y podrían quedar, lo cierto es que si no hay alguien que tire de ellos, no lo hacen, y están a deseo".

Por este motivo, si hay alguien interesado en mandar su currículo para formar parte de este proyecto puede hacerlo al correo electrónico rzestella@anfasnavarra.org.