orque en estos tiempos complicados para los pequeños productores es más importante que nunca impulsar la venta directa además de poner en valor el trabajo de los y las baserritarras, ayer se celebró la feria de producto local de Leitza con 17 puestos en el frontón y el foco puesto en las medidas de seguridad. Y es que las obras en la cubierta del Ayuntamiento despejaron dudas a la hora de decidir la ubicación. Con el aforo restringido a 150 personas, para acceder a la cancha había que limpiarse las manos con gel hidroalcohólico y seguir un itinerario en un sentido, con salida en la puerta lateral para evitar aglomeraciones. Asimismo, había dos puestos, uno de talos y otro de burruntzi en la carpa que ha instalado el Ayuntamiento en el recinto que comparte el instituto y la escuela para dar servicio a ambos centros durante la crisis sanitaria.

Así, cientos de personas pasaron a lo largo de la mañana por la feria en una animada mañana para comprar y llenar la despensa con alubias, miel, nueces o queso además de otros productos de temporada, con hermosos y lustrosos puerros, acelgas o berzas. Y es que daba gusto ver ayer los puestos.

Era la sexta edición de esta organizada por el grupo de consumo Leitzeko y el Ayuntamiento de Leitza para promocionar los productos de proximidad para el desarrollo local y el mantenimiento de formas de vida dignas y sostenibles en el medio rural. Y volvió a ser un éxito pese a que este año no acudieron productores de Areso, algo circunstancial, según apuntaron desde Leitzeko, un hueco que se cubrió con nuevos puestos. Tampoco hubo muestra de ganado ni la comida popular en la que se reúnen organizadores y productores.

"Aunque teníamos dudas, teníamos que claro que merecía la pena realizar un esfuerzo, más cuando las grandes superficies siempre han estado abiertas", comentaban en el grupo de consumo. "Desde el Ayuntamiento nos animaron a seguir adelante, siempre y cuando los y las productoras estuvieran animados y así era", recordaban. Lo cierto es que los baserritarras agradecían el trabajo desinteresado que realiza Leitzeko, un auzolan por y para el pueblo.

Pero para que el sector pueda seguir adelante, las ventas no se limitan a un día y Leitzeko edita un folleto con una lista de una veintena de baserritarras que ofrecen sus productos toro el año, especificando cuáles y teléfono de contacto. Dadas las restricciones existentes, ayer no se pudo repartir pero si descargar en un QR. Asimismo, se buzonearon la pasada semana en las viviendas de Leitza y Areso.