Como defensores a ultranza del vacile ingenioso desde las gradas de fútbol frente al insulto barato (sea “Hdp”, eso de “Muérete” o incluso rebuznos de racismo puro y duro), hay que rendirse a eso que la afición del Arsenal le cantó el otro día al Real Madrid: “¿Sois el Tottenham disfrazado?”. Para ponerle contexto, el Tottenham Hotspur es el rival por antonomasia del Arsenal, y para ambos clubes pocos partidos de cada temporada son más importantes que los derbis del Norte de Londres, que juegan uno contra otro (la distancias entre sus estadios es de apenas 3 millas). En suma, que la guasa iba tirada con mucha intención, porque si se mira bien es menos cruel con el Real Madrid que con el Tottenham, porque denota que del primero se esperaba mucho más nivel mientras que al segundo se le da por supuesta una ínfima calidad de juego.
