Se cumplen dos años del inicio de este conflicto. Sin visos de finalizar, los frentes bélicos siguen abiertos. Este conflicto ha sido un escenario de pruebas para la IA, con ambos bandos utilizándola para mejorar sus capacidades militares. Empleada para analizar grandes cantidades de datos, como imágenes de satélite, videos y comunicaciones, a fin de obtener información sobre las fuerzas enemigas, el terreno y las posibles amenazas. Con esta información se toman decisiones estratégicas y tácticas, como la planificación de ataques o la defensa de posiciones. La IA se utiliza para lanzar ataques cibernéticos contra las infraestructuras enemigas, para interrumpir las comunicaciones, el suministro de energía y los sistemas financieros.

Al igual, que la Guerra Civil en España, fue un escenario de pruebas para la aviación, hoy el conflicto en Ucrania está siendo utilizado para el desarrollo de nuevas tecnologías, tanto por parte de los gobiernos, como de la industria, convirtiéndose en un laboratorio viviente para la guerra con IA. Aquí no caben los derechos humanos, al potenciarse los esfuerzos de inteligencia geoespacial y guerra electrónica; los drones son utilizados constantemente. Esta guerra, en un salto cualitativo en cuanto a las estrategias y formas de identificar a los soldados, para recopilar pruebas de crímenes de guerra, y la localización de minas terrestres. Este conflicto es un anticipo de las guerras del futuro, donde nadie quiere detenerlo, sin importar el número de efectos colaterales, que se producen con la muerte, y destrucción de viviendas e infraestructuras. Los distintos vaticinios de su final, de momento, no se han cumplido, tal vez, por el interés de ambos bandos, en seguir utilizándola como banco de pruebas. Los seres humanos no importan, al igual que en Gaza, Sudán, Yemen, etcétera. Seguimos en el negocio de la guerra, como prioridad, por encima del desarrollo humano. ¿Se desarrollará una normativa internacional que regule el uso de la IA en la guerra? Los Convenios de Ginebra de 1945, para limitar la crueldad de la guerra, son historia.