Para terminar el año, en Ansoáin, nos instalaron tres nuevos pipican. Los pocos jardines que tenemos se han adjudicado a las mascotas. Pero me voy a referir al situado en travesía Montejurra. Es calle peatonal. La distancia con la vivienda es de 3 metros 20 centímetros. También pasa al lado el carril de bicicletas que me figuro resulta incómodo tener una valla tan cerca. Era una zona verde preciosa hasta que se empezó a utilizar por los perros. Yo me pregunto si terminarán por secarse los árboles que hay y qué jardines nos quedan para que jueguen nuestros niños y niñas.