ardenas es Parque Natural desde el año 1999 y Reserva de la Biosfera desde el 2000, además de Zona de Especial Conservación. Sin embargo, agosto de 2020, una vez más, ha sido un buen ejemplo de que ZEC, Reserva Mundial y Parque Natural pueden ser una falacia en Bardenas. Nuestro Parque Natural no está gestionado por la comunidad autónoma, sino que lo está por la Comunidad de Bardenas, de obsoleta estructura que no respeta representación democrática según número de habitantes de cada congozante. Pero, además, sus caminos se abren y se cierran al capricho de los vaivenes de los planes del Ministerio de Defensa y Ejército del Aire. Con escuetas notas que rayaban en el ridículo por su falta de información, la Comunidad de Bardenas comunicaba escuetamente a principios de mes, sobre corte de caminos por "vuelo real". Es de suponer que no se refería a ninguno que tuviese que ver con la monarquía, sino con "fuego Real". Lo anunciaban en plena época de nidificación de aves, mientras se prohibían, con razón, a personas y vehículos otras actividades bastante menos ruidosas y peligrosas. La Asamblea Antipolígono denunciamos públicamente la ocurrencia y poco después se anunciaba cambio de fechas para dicho "vuelo real". Cuando llegaron dichas fechas, de nuevo se anunció su cancelación. En ninguna de sus notas ha informado la Comunidad de las causas para llevar a cabo o cancelar las maniobras militares. Es el propio Ministerio de Defensa quien decide si se llevan a cabo o no.

Por supuesto, nos alegramos de que se cancele cualquier maniobra militar en Bardenas, y más aún tratándose de fuego real. Pero este ir y venir de cierres o aperturas de caminos del Parque Natural de las Bardenas según capricho e interés militar, no es de recibo. ¿Qué pasa con la actividad de las varias empresas de turismo activo que trabajan en Bardenas? ¿Qué hacen con sus clientes y las cancelaciones? ¿Importan o no importan las épocas de nidificación? No podemos vivir a expensas de la instalación militar.

En su informe sobre planificación y gestión de parques naturales, J. García Navarro, de la Universidad Politécnica de Madrid, afirma que el gran cambio producido en la gestión de áreas protegidas de los últimos cuarenta años ha desplazado los conflictos en la gestión de los parques desde la discusión sobre lo que "ocurre dentro de los límites del parque" a lo que "ocurre fuera e influye necesariamente en lo que ocurre dentro del parque". La conclusión es que los parques naturales deben ser considerados como partes integrantes de las relaciones económicas, sociales y ecológicas del territorio en que se encuentran. Y los gestores y planificadores deben asumir, probablemente desde un nuevo modelo, la necesidad de hacer compatibles las exigencias de conservación de nuestro patrimonio natural con el uso sostenible del territorio que lo contiene.

¿Cómo aplicamos esto al Parque Natural de las Bardenas, cuando tiene forma de dónut con un agujero central ocupado por un polígono de tiro y bombardeo único en Europa, utilizado por el Ejército del Aire español e incluso por diversos países de la OTAN? Si lo que ocurre fuera influye necesariamente dentro, ¿cómo puede permitirse este polígono de tiro y bombardeo en plena Reserva de la Biosfera y Parque natural?

Si a estas razones le sumamos las humanitarias, las que nos hacen sentirnos personas solidarias con quienes huyen de guerras preparadas en este y otros lugares de entrenamiento militar. Si le sumamos la necesidad de reforzar servicios esenciales sanitarios, de enseñanza, sociales, durante esta pandemia. Si le sumamos la sinrazón de enterrar en Bardenas toneladas de explosivos y de erario público que debiera ir destinado a los fines descritos anteriormente, nos sobran los motivos para reivindicar el desmantelamiento del polígono de tiro y bombardeo de las Bardenas.

Queda menos de una década para que finalice el actual convenio entre la Comunidad de Bardenas y el Ministerio de Defensa. Es hora de que las instituciones civiles navarras se pongan manos a la obra para defender los intereses ciudadanos y los medioambientales, que también son intereses nuestros. En cuanto la situación sanitaria nos lo permita, la Asamblea Antipolígono retomaremos las Marchas por el desmantelamiento del polígono de tiro de las Bardenas. Y ayuntamientos y Gobierno navarro, además de la propia Comunidad de Bardenas, tendrían que buscar y ofrecer activamente vías de financiación alternativas a las entidades que hoy se nutren del cánon militar, y comenzar conversaciones con el gobierno español para derogar el decreto Aznar que establecía ese territorio como Zona de interés preferente apara la Defensa, terminando con este sinsentido que significa el polígono de tiro de las Bardenas. Todo ello con la finalidad de que Bardenas finalice esta década como territorio de paz y plenamente de conservación medioambiental. La Asamblea Antipolígono no nos cansaremos de repetirlo: desmantelamiento del polígono de tiro de las Bardenas.

En representación de la Asamblea Antipolígono

Los parques naturales deben ser considerados como partes integrantes de las relaciones económicas, sociales y ecológicas del territorio en que se encuentran

Es hora de que las instituciones civiles navarras se pongan manos a la obra para defender los intereses ciudadanos y los medioambientales, que también son intereses nuestros