Mucho se ha hablado estos días de las obras de rehabilitación integral de la ETI San Juan en Tudela. De hecho, el anuncio de que se va a ampliar la oferta de ciclos formativos es, sin duda, una buena noticia para nuestra ciudad y la Ribera de Navarra.
Sin embargo, lo que se ha omitido son los daños colaterales que implica esta ampliación. El centro de ETI San Juan no sólo acoge a los grados de FP, sino también al Centro de Educación Básica para Personas Adultas (CPEBPA). No se contempla que este centro vaya a volver a ETI San Juan y aquí nuestros representantes de Educación y del Gobierno de Navarra no han estado a la altura. Han decidido quitarle toda su entidad, disgregándolo en diferentes partes que se van a acoplar a los huecos encontrados en otros centros educativos del Gobierno de Navarra. Esta decisión se ha tomado de manera arbitraria y unilateral, informando a los centros receptores a última hora. La falta de planificación ha sido palmaria.
La Escuela Oficial de Idiomas de Tudela ha sido elegida para acoger al equipo directivo del CPEPBA y a parte de sus grupos. La población de Tudela y alrededores ya conoce nuestra escuela y adivinará los problemas que va a causar esta decisión. Somos un centro pequeño que cuenta con trece aulas. Vamos a tener que renunciar de manera permanente a tres de ellas para habilitar espacios para despachos del nuevo centro, además de tener que ceder otras aulas para su uso por parte del alumnado del CPEPBA. La Escuela Oficial de Idiomas es un servicio a la ciudadanía que lleva treinta y seis años en Tudela. Fue una reivindicación peleada y conseguida por parte del Ayuntamiento de Tudela en 1989 para ofrecer este tipo de enseñanza de lenguas en la Ribera de Navarra. La construcción de un edificio propio en 1993 fue otro paso importante que nos consolidó y dio identidad. Nuestro centro está preparado para impartir clases de idiomas y certificar niveles de lengua, no para hacer clases de informática. Desvirtuar su función va a tener consecuencias negativas para nuestro centro, ya que el CPEPBA no sólo necesita espacio para sus clases, sino que tiene que trasladar toda su infraestructura: materiales, mobiliario, equipos informáticos, instalaciones de red, etcétera. No tenemos espacio físico para almacenar todo esto. Además, este traslado está suponiendo un esfuerzo extra de gestión, organización y funcionamiento, hasta el punto de tener que postergar otras tareas de importancia que nos atañen verdaderamente.
Por otro lado, nuestra oferta educativa va a verse perjudicada por este movimiento ya que elimina toda posibilidad de ampliación en un centro de por sí limitado. La información sobre esta mudanza inminente se nos dio en el último momento por parte del Servicio de Infraestructuras del Gobierno de Navarra. El trabajo previo de preparación de las obras en ETI San Juan debería haber conllevado una gestión de los dos centros situados en ese edificio, y no una serie de improvisaciones a las que tenemos que responder ahora los centros afectados.
Desde la Escuela Oficial de Idiomas de Tudela queremos denunciar estos procedimientos que perjudican a los dos centros implicados, nuestra escuela y el CPEPBA. Si nuestros representantes políticos quieren apostar por la educación de adultos, que esa apuesta se materialice en un edificio propio para el CPEPBA y no en intentar perjudicar a otros centros con decisiones impensadas y falta de transparencia. En la tan nombrada Agenda 2030 se promulga una educación de calidad que sea inclusiva, equitativa y que garantice oportunidades de aprendizaje a lo largo de la vida. Está muy bien insistir en que incorporemos el logo de dicha Agenda a todas nuestras publicaciones, pero estaría infinitamente mejor llevar a cabo los objetivos que ésta promueve.
La insatisfacción del alumnado del CPEPBA ha quedado patente en la prensa últimamente. El equipo directivo, el claustro y el personal de administración y servicios y de la Escuela Oficial de Idiomas de Tudela nos sumamos a ese malestar.