pamplona. Osasuna ha basado la temporada en un bloque reducido de jugadores que fueron capaces de aguantar el tipo en los momentos en los que el equipo tuvo que dar un paso hacia adelante. Cuando el pesimismo se instaló entre la afición rojilla al ver el calendario que aguardaba en las cinco últimas jornadas, la unión del vestuario y la comunión con el equipo resultaron fundamentales para lograr el objetivo de la permanencia.

Dejando a parte el caso de Ricardo, que a sus 39 años disputó todos los minutos en los 38 partidos de Liga, Patxi Puñal ha sido el jugador de campo que más minutos ha disputado en la presente temporada, con 2.746, seguido por Monreal (2.665), Flaño (2.570), Camuñas (2.548), Nekounam (2.270), Nelson (2.260) y Lolo (2.014). Hubo jugadores, como Sergio y Soriano, que se han quedado cerca de los 2.000 minutos, y otros como Rúper al que una lesión solo le ha permitido disputar 81 minutos.

Uno de los detalles que destaca por su rareza es que los cuatro delanteros apenas han tenido mucha participación. Aranda y Pandiani, que eran en un principio los encargados de dirigir las operaciones de ataque, no han disputado más de 21 partidos en todo el campeonato (sobre todo por culpa de las lesiones), mientras que Leka, pese a tomar parte en 26 encuentros, jugó muchos menos minutos.

A Kike Sola, que empezó el año como cuarto delantero, la llegada de Mendilibar le abrió el camino a la titularidad y los datos que arroja el cascantino demuestran el acierto de su apuesta. Ha acabado la temporada como máximo artillero del equipo, con 7, alguno de ellos trascendentales para la salvación de Osasuna. Junto a él ha destacado la participación de Cejudo, que llegó en el mercado de invierno para sustituir a Juanfran y que en apenas dos meses ha demostrado el acierto de su contratación. Suyo fue el gol que certificó la salvación, pero más importante ha sido su desparpajo y valentía para encarar a los rivales por la banda.

Con Camacho primero y Mendilibar después, Osasuna ha manejado un número bastante amplio de jugadores, que iban alternándose en función de bajas, lesiones o momentos de forma. Damiá, sin ser titular, ha tomado parte en 27 partidos, mientras que Josetxo, en su temporada del adiós, fue utilizado en solo 9 partidos. Coro, fichado como refuerzo, se va como llegó, sin apenas haber tenido tiempo de haber demostrado nada; y Pandiani, amargado por las lesiones, también dijo adiós a Osasuna. Entre todos se logró el objetivo marcado al inicio de la temporada.