Era un chaval con un talento descomunal para jugar a fútbol, con los oídos abiertos, los ojos en órbita y los pies en movimiento, pero toda la ropa le quedaba varias tallas más grande. Era tan menudo y tan flaco que nadie sabía cómo iba a crecer y a responder en el fútbol adulto. La infancia futbolera de Aimar Oroz ha sido sintetizada por La Liga en un reportaje que ha grabado en sus orígenes en la Agrupación Deportiva San Juan y hablando con los responsables de la cantera de Tajonar.

Julen Foncillas, entrenador de San Juan, recuerda que desde pequeño ya destacaba en las categorías más inferiores. "Cuando vino a jugar era pequeño, flaco, tenía esa timidez, y yo le decía a mi compañero, espérate a verle con el balón y en el campo".

Todas las intenciones que anunciaba el pequeño de Arazuri en ese cuerpo, las desempeñaba luego sobre el césped. "Transmitía cierta fragilidad porque era muy delgadito y nunca llenaba la camiseta", recuerda Ángel Alcalde, director de Tajonar en este reportaje. "Pero toda esa fragilidad la suplía con toda esa excelencia a la hora de jugar a fútbol".

En la grabación también participan dos amigos de Aimar de toda la vida, Iker Hernández y Mikel Percaz, que destacan del mediapunta rojillo que "con el balón en los pies era una bestia. Jugaba de todo, metía los goles solo y el equipo en el que se ponía a jugar era el equipo que ganaba. Nadie piensa que va a llegar a ser futbolista, pero si te pones a mirar su juego, que siempre estaba jugando con el balón, no es algo que te sorprenda tanto", recalcan.

Foncillas rememora que Aimar jugó tres temporadas en la AD San Juan y que luego en Infantiles y tras obtener el trofeo de Mejor Jugador en el Interescolar de Tajonar, Oroz pasó a las filas de Osasuna. "Había cosas del chico que te sorprendían, porque recuerdo que su padre me decía que cuando llegaba a casa se apuntaba en una libreta las cosas que le decía en el vestuario. Son anécdotas que te van contando que no son normales".

Alcalde afirma que el temple de Aimar con la pelota le viene de antaño: "Siembre buscaba el balón aunque fuera el último partido de Liga y hubiera una gran presión. Nunca se escondía, ha querido jugar y busca la pelota". El responsable de la cantera rojilla no obvia que "Aimar llegó en un momento crítico al club, cuando había descendido a Segunda después de 14 años y afloró una deuda importante. Pero él expresó que su deseo era jugar en Primera con Osasuna y en El Sadar. Tiene un sentimiento de pertenencia brutal. Es un ejemplo que nos pone los pelos de punta a todos. Y cada vez que un jugador como Aimar, formado en Tajonar, llega arriba, es una fiesta para todo el osasunismo", expresa Ángel Alcalde.

Otro de los pilares actuales de Tajonar, el director técnico Patxi Puñal, excapitán rojillo, destaca que lo importante de Oroz ha sido "la tranquilidad que siempre se le ha dado su familia, el club, su entorno, sus representantes.... Aimar ha estado varias temporadas en el Promeras, ha hecho pretemporadas con el primer equipo... Antes no sabemos si era un chico preparado para jugar en Primera, pero lo que está claro es que ahora sí lo está".