La parlamentaria de Podemos Ainhoa Aznárez ha advertido que el proyecto de Mina Muga "podría llevar al aumento de la sismicidad, un hecho que afectaría al embalse del Yesa y a los deslizamientos que se han producido en sus dos laderas, es decir, a un riesgo para la población de la zona, algo que no podemos permitir de ninguna manera".

"Es un escándalo que a unos meses vista de obtener todos los permisos, según anuncia la empresa a bombo y platillo de forma constante, los propios directivos de Geoalcali estén abandonando el barco por la parte trasera, y con los bolsillos llenos", ha censurado en una nota.

Aznárez ha asegurado que "hay miles de razones para asegurar que este proyecto es inviable medioambientalmente no sólo por los riegos geológicos de sismicidad que se han obviado en los estudios de impacto ambiental sino por los cuatro millones de toneladas anuales de residuos que generará y que quedarán almacenados en una gran montaña, por la contaminación salina de cauces y acuíferos, por la desmedida carga de transporte cifrada en 102.500 camiones pesados al año que circularían por las carreteras hasta el puerto de Bilbao y por el excesivo consumo de agua que equivale al suministro de una ciudad de 165.000 habitantes".

La parlamentaria de Podemos ha afirmado que la empresa que gestiona este proyecto, Geoalcali, "es una empresa 'junior', cuyos objetivos son mayoritariamente especulativos y que carecen de experiencia en este tipo de proyectos". "Lo que coincide con la huída de tres caras visibles de quienes pretendían explotar la mina de potasa y que han vendido ya sus acciones obteniendo millones de euros de beneficios", ha apuntado.