Lunes de análisis en la UPNA sobre este momento político desbordante, en una jornada organizada por I-COMMUNITAS con reconocidos expertos. Poco antes de arrancar la primera mesa redonda, en los micrófonos de la COPE en Madrid , José Luis Rodríguez Zapatero se reafirmaba en el papel que jugó en el fin de ETA. Con un discurso y un tono que en las horas siguientes fue muy celebrado por socialistas que recargaron algo de su moral maltrecha. Zapatero disputó marcos con los que la derecha saca petróleo, y lo hizo fuera de casa, con la firmeza y la autoridad de la experiencia. Totalmente consciente de que ETA es hoy uno de los principales combustibles del PP, y de que el PSOE anda falto de amor propio. Su encendida defensa de Pedro Sánchez fue una demostración no ya de lealtad, sino un mensaje de “confianza”, con una idea concluyente, el de estar ante “unas elecciones disputadas”, Justo a lo que necesita agarrarse el Partido Socialista.

Sobre cuál va a ser la capacidad de movilización de unos y otros trató en buena medida la jornada en la UPNA. Por tanto, era ineludible que Sánchez se convirtiera en el nombre propio más referenciado en las dos mesas redondas. 

“Hay una pulsión antisanchismo que anida en una parte importante del electorado que va a votar al PP”, constató Cristóbal Torres, catedrático de Sociología en la UAM. Esa tensión también la destacó la subdirectora de Colpisa, Lourdes Pérez que cree que hay más antisanchismo que anti PSOE”. Para el analista Javier Domínguez, “los medios van a poner el foco en la crisis sucesoria de Pedro Sánchez, y va llegar más debilitado”. Por su parte, el catedrático de Ciencia Política emérito en la UAB, Joan Botella, se mostró contrariado con los marcos que presentan disyuntivas “entre Sánchez y España”. Otro catedrático, Juanjo Álvarez puso de manifiesto que Sánchez tiene “mucha mejor imagen fuera de España que en la dimensión interna”. El tono de broma lo puso el consultor Ion Ansa, que aunque piensa que Sánchez lo tiene muy difícil, se muestra contrario a los funerales apresurados, dada además la biografía del líder socialista.  

EL PSOE, ANTE SU IZQUIERDA

¿Qué estrategia va a tomar ahora el PSOE? Lourdes Pérez considera que visto el estreno de Sumar, Sánchez va a ir “a por el voto a su izquierda”, “a una campaña absolutamente polarizada, y al bipartidismo de nuevo cuño pero más o menos de toda la vida”. 

Criterio similar mostró la consultora Eva Silván, para quien Pedro Sánchez está girando a la izquierda, “y ya no fiarlo todo a su socio a la izquierda”. Por su parte, el catedrático de Derecho Internacional Privado Juan José Álvarez reflexionó sobre cómo “dedicamos muchísimo tiempo al análisis de la geopolítica mundial y de la UE, de la complejidad sobre los retos de la gobernanza y la democracia”, cuando la “capacidad de influencia en el voto se concentra más en el hedonismo”. Álvarez citó al pensador Guilles Lipovetsky (que entre otros libros ha publicado ‘La sociedad de la decepción’ o ‘El imperio de lo efímero’). Mucho más optimista se mostró en este punto Joan Botella, que considera la sociedad española “más sabia, abierta, tolerante y dinámica que los representantes políticos”. Asunto que en sí mismo daría para otra jornada.

DIFICULTADES

Cuatro cuestiones de fondo pueden complicar sensiblemente la remontada al PSOE. Para el catedrático Cristóbal Torres, los ciclos electorales de Gobierno seguramente se están acortando”. Según Lourdes Pérez, al PSOE no le va a servir intentar movilizar con el miedo a la ultraderecha. “Solo le funcionó en abril del 19, en noviembre de ese año ya no”. Pérez cree que ese intento puede incluso favorecer al PP, y puso como ejemplo las elecciones de Andalucía de 2022. También cree un error decir que “la economía española va como una moto”, con el alza de precios de los alimentos. 

Punto y aparte es el papel EH Bildu y Esquerra como socios del PSOE. Para el consultor Ion Ansa, EH Bildu ha construido un relato basado en la voluntad de formar parte de la gobernabilidad. Pérez, desde una óptica opuesta, cree que el PSOE no ha “querido tener en cuenta el desgaste de enlazar la suerte del país a formaciones independentistas”. En el asunto de las listas de Bildu, considera que esta formación “generó el problema y cuando lo solucionó lo rentabilizó”.

EN LA CAV

La situación en la CAV también fue materia de análisis. Eva Silván habló de “desgaste de la gobernabilidad” del PNV. A su juicio, este partido “veía una Euskadi muy homogénea, y no está siendo capaz de interpretar una Euskadi mucho más heterogénea”. 

El próximo año, recuerden, habrá elecciones Europeas, en la CAV y en Galicia. Si, como todo indica, Urkullu se presenta, cumpliría 15 años y medio en el poder, dos más que el ciclo de González en la Moncloa. Comparando el número de votos conseguidos en los comicios de 2023 y 2019, según ilustró el secretario de Coordinación y comunicación social de Lehendakaritza, Manu Castilla, el PNV perdió 86.058, el PSE-EE 27.617, y Podemos 40.979. Por contra, EH Bildu obtuvo 23.667 votos más.