El presidente de la Fundación de Víctimas del Terrorismo (FVT), Tomás Caballero, instó este martes en el Congreso a que los diputados elegidos en la próxima legislatura no dejen de nuevo “a cero” el marcador de defensa de las víctimas y que den pasos para evitar que condenados por ETA aspiren a ocupar un escaño.

Las palabras fueron pronunciadas por Caballero en el acto institucional que cada 27 de junio desde 2010 celebra la Cámara Baja para homenajear a las víctimas del terrorismo y al que desde hace varios años declinan asistir varias asociaciones por la presencia de EH Bildu en el hemiciclo. Al acto acudió la consejera del Gobierno de Navarra Ana Ollo.

Sin referencia expresa a la formación abertzale, el presidente de la FVT, el único interviniente en el acto junto a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, lamentó que las reivindicaciones de las víctimas hayan quedado sobre la mesa, como la equiparación de las indemnizaciones entre víctimas con y sin sentencia o el impulso a una legislación que de verdad incentive la colaboración en el esclarecimiento de los atentados no resueltos.

“Les imploro que vuelvan a ver a las víctimas y a los terroristas en su verdadera dimensión, porque quienes cercenaron hasta el derecho a la vida, no pueden pretender ninguna concesión, expresa o tácita, mientras sigan mutilando el derecho a la justicia de las víctimas”, enfatizó Caballero.

Por ello, pidió a los diputados que “den un paso al frente y profundicen en la legislación” para impedir situaciones tan dolorosas como la de ver en las listas electorales a condenados por atentados terroristas.

“Eviten que puedan convertirse en representantes de la soberanía popular quienes trataron de destruir los pilares de nuestra convivencia cobrándose la vida de nuestros padres, hermanos, hijos o amigos”, apeló Caballero, quien hizo hincapié en la “paradoja” de un sistema que prohíbe a un pederasta trabajar con menores pero permite que quienes asesinaron a diputados o concejales pueden aspirar a tener un escaño.

“Por dignidad democrática, los condenados por delitos de terrorismo deberían verse privados del derecho de sufragio pasivo de por vida”, añadió el hijo del concejal de UPN asesinado por ETA.

Las elecciones, a la vista

Las elecciones del 23-J y las polémicas listas de EH Bildu en las autonómicas marcaron el homenaje del Congreso, del que se volvieron a descolgar Vox y asociaciones de víctimas como la AVT, Anvite y Covite Batet y el presidente del Senado, el también socialista Ander Gil, ejercieron de anfitriones, mientras que el PP delegó la representación en sus integrantes de las Mesas de las Cámaras. Así, el senador Rafael Hernando, que el 23-J volverá al Congreso, ejerció de portavoz del Grupo Popular y se sentó al lado del socialista Patxi López. También asistieron Enrique Santiago (IU-Sumar), Edmundo Bal (Ciudadanos), Aitor Esteban (PNV) y el portavoz adjunto de Bildu, Oskar Matute, que por protocolo se colocó junto con Carlos García Adanero, exdiputado de UPN ahora en las listas del PP, una de las voces más críticas con la coalición soberanista, a la que tacha de “filoetarra”.

Mientras que Matute evitó hacer declaraciones, el portavoz jeltzale destacó la importancia de participar en los homenajes a las víctimas para que no vuelva a haber actos terroristas.

Batet apeló a la unidad y recordó que este acto de homenaje cumple con la misión esencial del Parlamento, que es “escuchar”. “Nuestra democracia ha sido más fuerte cuando ha escuchado a las víctimas del terrorismo. Compartir su desgarro por la pérdida, la indignación ante la sinrazón y la confianza en las instituciones en la defensa de nuestra convivencia ha hecho que los ciudadanos y ciudadanas hayamos comprendido mejor su sufrimiento y su ejemplo”, admitió. El homenaje se cerró con un minuto de silencio y con una interpretación de violenchelo.

Anvite, en Pamplona. La Asociación Navarra de Víctimas del Terrorismo de ETA (Anvite) conmemoró este día junto al monumento a las víctimas del terrorismo, en la Plaza de la Constitución de Pamplona. Asistieron los presidentes de UPN, Javier Esparza, y PPN, Javier García, y más de una treintena de ciudadanos.