Gabriel Le Senne

"Al carecer de pene, la mujer es más beligerante"

Marginar el catalán, violencia intrafamiliar e “inmigración ilegal” fueron las claves del pacto entre PP y Vox en Baleares a cambio de que Marga Prohens gobernase en solitario y se otorgara la presidencia del Parlamento a Gabriel Le Senne, quien se ha caracterizado por sus discursos racistas y su animadversión hacia la lucha contra el cambio climático, hablando de “agoreros del clima”. “Las mujeres son más beligerantes porque carecen de pene”, afirmó en redes sociales, donde profirió la siguiente afirmación: “En España entre hispanos y africanos no está claro dónde acabará la cosa, pero sí que los nativos estamos cada vez más en peligro de extinción”. Entre sus compromisos se halla arrinconar al catalán en la función pública y en la escuela, y acabar con el supuesto “adoctrinamiento ideológico”.

Su apellido paterno permite ubicarle en un entorno acomodado y conocido dentro de la sociedad mallorquina. Abogado colegiado y con una década de recorrido profesional, Le Senne es autor del libro 'Dios nos hizo libres. Apología del cristianismo y el liberalismo'. Cuenta con una posición contraria a elementos como el feminismo o el aborto, como se puede apreciar en el siguiente tuit: “Feminismo, aborto, LGTBI, eutanasia, ecocatastrofismo, comparten objetivo: que rechacemos matrimonio e hijos”. Y remató: “Solo hay dos sexos, el género está bien en la tienda”.

María de los Llanos Massó

“Según el ADN, una mujer trans no es mujer”

María de los Llanos Massó preside ahora las Cortes Valencianas tras un historial en contra de los derechos de las mujeres, al haber estado en la asociación antiabortista Castellón por la vida, un colectivo que ha organizado concentraciones a las puertas de las clínicas, y mantuvo vínculos antes de afiliarse a Vox con Hazte Oír. Contraria al bilingüismo y a la existencia de la violencia de género, también ha expresado su opinión con respecto a la dictadura franquista o defendiendo el pin parental. Sus discursos están plagados de intentos de coartar las enseñanzas en la educación pública. Criticó la existencia de libros en los colegios que muestran imágenes de diferentes tipos de penes: “¿Cree usted que estas imágenes de penes de adultos de distintos tamaños y formas benefician a los niños?”, soltó.

“Según el ADN, una mujer trans no es una mujer”, se encuentra entre las frases más retrógradas de esta activista ultracatólica, acusada hace dos años por el excoordinador de Vox en Benicarló, Vicente Noguera, que se dio de baja acusándola de comandar una “institución sectaria, piramidal, autoritaria, dictatorial y falta de humanidad”. Ha abanderado la cruzada de Vox, junto con la entidad Abogados Cristianos, contra la campaña del consistorio de Castellón de reparto de libros de temática LGTBI en los centros docentes, o contra la retirada de la cruz franquista del parque Ribalta de Castelló.

Marta Fernández

“Montero solo ha sabido arrodillarse para medrar”

Marta Fernández, nueva presidenta del Parlamento de Aragón, ha escrito mensajes en los que negaba el cambio climático, arremetía contra las feministas y ridiculizaba las medidas de protección durante la pandemia. Pero una de sus dianas favoritas ha sido la ministra de Igualdad. “Irene Montero solo sabe arrodillarse para medrar”, soltó la zaragozana, licenciada en Derecho y que dio el salto a la política hace cuatro años como diputada de Vox. En marzo de 2021 escribió en Instagram: “La violencia de género no existe”. Dos años antes se mostró a favor de legalizar las armas. “Si te entran en casa, y ves que están acuchillando a tu padre, ¿tú no coges la escopeta?”.

De sus redes ha eliminado otros donde cuestionaba la eficacia de las vacunas. En noviembre de 2021 respondía a un usuario que se quejaba de que su familia lo obligaba a vacunarse para poder asistir a la cena de Navidad: “¿Te han asegurado ellos que no tienen sida o tuberculosis?”. En otro mensaje decía: “Te equivocas, feminista. Sois las nietas de los cristianos que echaron a los moros de la Península para que pudierais pasear en tetas por la calle”. Y además publicó una imagen de una familia formada por un hombre, una mujer y dos niños, que se protege con un paraguas de la Agenda 2030, del feminismo, del colectivo LGTBIQ+, del islamismo y del comunismo.

Juan García Gallardo

“No al trapo arco iris de la izquierda más sectaria”

Los episodios polémicos del vicepresidente de Castilla y León, Juan García Gallardo, han servido de avanzadilla de lo que ahora acontece. La interrupción voluntaria del embarazo fue la cuestión protagonista de la que el PP tuvo que dar cuenta a las primeras de cambio tras las amenazas del número dos de Mañueco, que nunca ha terminado de desautorizarle. Su última perla ha llegado con la celebración del Orgullo, diciendo “sí” a la bandera de España y “no” a “un trapo arcoíris” que “une a la plutocracia internacional con la izquierda más sectaria”. Es además de los que cree que la presunción de inocencia de un hombre “se diluye” cuando un hombre inocente es denunciado por violencia de género, llegando a hablar de “mujeres desalmadas”.

En otro capítulo reciente añadió que él “no se santigua ante los dogmas climáticos”. “El clima lleva cambiando desde el origen de la Tierra”, sentencia. Su mala gestión forestal le convirtió en blanco de las burlas cuando posó para la foto sobre una incinerada Sierra de la Culebra con un impoluto pantalón blanco, americana y zapatos castellanos. Después anunció parados limpiando los bosques para combatir los efectos del fuego. Entre sus dogmas, que el sexo está concebido para la procreación: “la despoblación se debe en buena parte al sexo por placer”.