El Ayuntamiento de Pamplona compró cerca de 370.000 mascarillas entre 2020 y 2021, en su mayoría con destino al área de Seguridad Ciudadana. En total, el desembolso durante ese periodo fue de 85.700 euros. La gran mayoría destinado a la compra de mascarillas quirúrgicas, más baratas y también con una protección menor. Las adquisiciones se llevaron a cabo una vez superado el estrés inicial de la pandemia, cuando el mercado se empezó a regular y ya no había problemas para adquirir material sanitario.
Las compras se produjeron entre abril de 2020 –el confinamiento comenzó en marzo de ese año– y finales de 2021. Junto a ello, el Consistorio recibió otras dos donaciones del Gobierno central, ambas de 31.000 mascarillas. La primera en noviembre de 2020 y la segunda en julio de 2021.
No constan compras ni entregas de nuevo material entre esos meses y mayo de 2022, cuando el Gobierno central, a través del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) vuelve a donar equipos de protección al Ayuntamiento. En este caso fueron 400.000 mascarillas quirúrgicas que caducaron un año después, y que a día de hoy siguen almacenadas en un depósito municipal.
Los precios
En la documentación que consta en Hacienda hay facturas relativas a dos áreas distintas. Por un lado de Seguridad Ciudadana, que adquirió 328.000 mascarillas en diferentes entregas por un valor de 57.695 euros. Todas, menos las 1.000 adquiridas en abril de 2020 y 14 más en septiembre de ese año, son mascarillas quirúrgicas. También se compraron mascarillas desde el área de Servicios Sociales, aunque en menor cantidad y mayor protección. Fueron 42.450 por un precio de 27.000 euros, prácticamente todas FFP2.
De esta forma, el precio por mascarilla oscila entre los pocos céntimos que se pagaron por las mascarillas quirúrgicas en primavera-verano de 2021, y los más de dos euros que costaron las FFP2, de mayor protección.
Estas cifras coinciden con lo que llegó a pagar Sodena por las mascarillas compradas para la CEN y para Salud al inicio de la pandemia. De esta forma, los 0,45 céntimos que pagó el Ayuntamiento por las mascarillas quirúrgicas en julio de 2020 coinciden con los 0,43 que pagó Sodena un mes antes. Mientras que los 2,2 euros pagados por el Consistorio por las FFP2 a finales de 2020 se acercan a los 2,25 abonados por Sodena unos meses antes, en condiciones de mercado más difíciles.
No obstante, destaca por su elevado coste los 4,98 euros que se llegaron a pagar por cada una de las 1.000 mascarillas tipo KN95. Un precio alto, aunque quizá motivado por la urgencia del momento, ya que fueron adquiridas en abril de 2020, justo con la desescalada.
Proveedores
En cuanto a los proveedores, la mayoría fueron empresas navarras, a quienes se les compraron cantidades pequeñas de mascarillas al principio y más elevadas después. Seguridad Ciudadana por ejemplo llegó a contratar tres compras de 75.000 mascarillas quirúrgicas con tres empresas diferentes en marzo, mayo y agosto de 2021.
Llama la atención sin embargo una empresa ajena a Navarra a la que el Ayuntamiento compró material. Se trata de Falco Global Universe, una sociedad dedicada a la importación, en apariencia durmiente. Fue creada en 2018 y sus ingresos están relacionados casi en exclusiva con la venta de material sanitario durante la pandemia, sobre todo a administraciones vinculadas al PP. La empresa pasó de facturar tres millones en 2020 a disolverse en 2022. Pamplona adquirió por esta vía 9.000 mascarillas (8.000 quirúrgicas y 1.000 KN95) por 16.371 euros en abril de 2020. Era su primera compra.
