El portavoz de Geroa Bai en el Parlamento de Navarra, Pablo Azcona, ha afirmado que los representantes de su coalición han salido "insatisfechos ciertamente con las propuestas" que les han trasladado la presidenta María Chivite y el PSN en el encuentro que han mantenido los tres socios del Gobierno de Navarra (socialistas, Geroa Bai y Contigo-Zurekin) para abordar las discrepancias respecto a los sobrecostes en las obras del túnel de Belate.
Al término de la reunión, que ha tenido lugar en el Parlamento de Navarra, Pablo Azcona ha explicado que "les hemos exigido y les hemos puesto encima de la mesa algo que ya hemos venido diciendo estos días, en primer lugar, queremos saber cuáles son las causas que hicieron que el departamento -de Cohesión Territorial- aceptase una modificación propuesta por la UTE de más del 10%, una modificación que ha supuesto ese sobrecoste". "En segundo lugar, también queremos conocer y valorar por qué el consejero faltó a la verdad a la hora de explicar esas modificaciones y desde luego que se pongan en marcha medidas y se diriman responsabilidades políticas que devuelvan la confianza al conjunto de los socios", ha subrayado.
Pablo Azcona ha destacado que "esto es lo que hemos pedido y salimos insatisfechos con las propuestas que nos han realizado la presidenta y el Partido Socialista".
"El PSN tiene que dar explicaciones"
Azcona ha declina explicar cuáles han sido esas propuestas del PSN y ha afirmado que les corresponde a los socialistas darlas a conocer, del mismo modo que no ha concretado si el PSN ha planteado algún cese. "Yo creo que son ellos los que tienen que explicar la propuesta que han hecho, pero desde luego seguimos exigiendo todas esas responsabilidades. No se dijo la verdad en su momento, tanto a los socios de Gobierno como a la propia ciudadanía y, por tanto, no se explicó bien ese sobrecoste del 10% que se aceptó por parte del departamento", ha insistido.
El portavoz de Geroa Bai ha afirmado que "el informe del interventor general deja a las claras evidentemente cuáles son los sobrecostes que atienden a una explicación técnica correcta y en este caso desde luego hay explicaciones que se dieron en su momento que no atienden a la verdad y, por tanto, se tiene que explicar por qué se hizo en su momento así, y mientras no se explique y no se tomen las responsabilidades políticas oportunas, evidentemente, para Geroa Bai no será suficiente".
Pablo Azcona ha explicado que desde el PSN "han quedado en analizar nuestra solicitud, que ya es pública, y desde luego, ante la insatisfacción de las propuestas realizadas, estamos a la espera de una reflexión en ese sentido".
Preguntado sobre si este escenario podría derivar en una ruptura en el Gobierno, Azcona ha señalado que "de momento vamos a esperar a que la respuesta atienda a las demandas de Geroa Bai, que son las demandas también de explicación que deben a la ciudadanía para explicar un sobrecoste de estas características y los argumentos que en su momento se dieron públicamente".
Insistido nuevamente sobre si considera que está en peligro el Gobierno, Azcona ha respondido que "lo que considero es que es necesario explicar todos estos términos para que se vuelva a restablecer la confianza necesaria entre los socios de Gobierno".
"Hemos planteado en este caso a los representantes del Partido Socialista y a la presidenta que se diriman exactamente las responsabilidades de por qué en su momento no se atendió a la realidad y se dieron unos argumentos para aceptar una modificación de la obra que no atienden a la realidad, según el informe del interventor general", ha insistido.
Sobre los plazos que manejan para resolver esta situación, Pablo Azcona ha afirmado que esto es "lo suficientemente importante y urgente para que se nos dé una respuesta lo más rápido posible, pero desde luego en estos momentos no hay un plazo establecido, pero creemos que es urgente, ya lo era el viernes".
Brecha abierta en los socios de gobierno
La gestión del sobrecoste de los túneles de Belate que está haciendo la dirección general de Obras Públicas ha abierto una brecha entre los socios de Gobierno. El pasado viernes, Geroa Bai y Contigo Navarra, los dos socios del PSN en el Ejecutivo de coalición, pidieron “responsabilidades políticas” después de conocer que la Intervención General ha puesto un reparo suspensivo contra el sobrecoste que autorizó el departamento de Cohesión Territorial a finales de julio.
Entonces, el consejero Óscar Chivite compareció para explicar las razones que llevaron al departamento a asumir un desvío de 8,5 millones sobre el coste total de la obra, que a partir de ahí ascendería a 84,6 millones. Ahora, el informe de la Intervención General cuestiona la cifra de los 8,5 millones, y solo avala el gasto de 2,53 millones. Esto abre un escenario jurídicamente incierto, porque la adjudicataria –ahora formada por Acciona y Construcciones Fermín Osés después de la salida de Servinabar– continuaba trabajando con la previsión de los 8,5 millones de desvío, y tienen pendientes los cobros al menos desde mayo de este año. Obras Públicas mantuvo el viernes una reunión con ellos y les aseguró que explorará “fórmulas legales” para que la obra continúe con normalidad, además de que les pagará en diciembre las certificaciones pendientes desde mayo de acuerdo a lo estipulado por la Intervención General, porque la prioridad máxima de Navarra es que las obras no se paren. En el departamento ven con horror la posibilidad de una interrupción de la reforma, porque Europa ha amenazado en más de una ocasión con graves sanciones económicas al Gobierno si no acomete ya el desdoblamiento de seguridad que necesitan los túneles. La disparidad entre las cifras del consejero y la Intervención, el cruce de informes con reparos y la gestión por parte de Obras Públicas ha soliviantado a los socios, Geroa Bai y Contigo Navarra, que han pedido desde “ya” responsabilidades políticas que señalan directamente a la cúpula del departamento de Cohesión Territorial, sobre todo el consejero Chivite y el director general de Obras Públicas, Pedro López Vera. Hoy lunes, los partidos que forman parte del Gobierno han mantenido una reunión de urgencia.
El origen
El origen de todo este embrollo está en el conocido como modificado número uno de la obra de los túneles de Belate. Ha generado cierta polémica porque surgió al poco de la adjudicación y supone un encarecimiento de cerca de un 11% de las obras por imprevistos de carácter técnico.
El consejero Chivite, en rueda de prensa, habló de “imprevistos sobrevenidos” y de la necesidad de tomar decisiones para reforzar la seguridad a la hora de ejecutar la obra. El terreno, dijo entonces, es menos favorable de lo previsto. La cantidad de agua que emerge de la montaña es mayor. Y los requerimientos de agentes externos, como la Confederación Hidrográfica del Ebro y el Cantábrico, han sido más numerosos. Chivite habló de la necesidad de excavar más el túnel, de reforzar más los arcos de sostenimiento y de aumentar la capacidad de las depuradoras. Y en su día recordó que el primer túnel de Belate tuvo en encarecimiento sobre lo inicialmente presupuestado del 35%.
Ahora, el grueso del sobrecoste de 8,5 millones se lo lleva la necesidad de construir un polvorín –para alojar explosivos– un poco más sofisticado que de lo normal –por las condiciones del terreno, la cercanía de unas casas...– y la necesidad de unas cerchas de sostenimiento que son casi un 50% más caras. Ahí se va casi un 70% del encarecimiento, y la Intervención no lo ve claro.
De todos modos, no serán los únicos desvíos económicos. La obra es, quizá, la más complicada en la historia reciente de Navarra. En la comisión de investigación del Parlamento foral, el director facultativo de la obra, el ingeniero Benjamín Lasheras Fernández, informó de que lo más normal es que haya otras desviaciones económicas aparte de los 8,5 millones del modificado.