"Al norte de Navarra, la frontera hace un quiebro hacia arriba, como pegándole un bocado a Francia, para que Baztan encuentre un rincón en el que esconderse y nadie perturbe sus apacibles inercias ancestrales. Pueblos como Erratzu, Irurita o Maya parecen museos etnográficos vivos, apenas manchados por el tráfico", así es como desde la prestigiosa revista de turismo National Geographic presenta el Valle de Baztan, una de las joyas de Navarra.
Conocido como 'la Suiza navarra', el Valle de Baztan es un territorio de 377 kilómetros cuadrados que está habitado por entorno a 8.000 personas. Un espacio que, tal y como apuntan desde National Geographic, "esconde algunos de los pueblos más coquetos del Reyno. Una tierra de tradición, verde, húmeda y recóndita que alimenta mitos y leyendas".
Los imprescindibles del Valle de Baztan según National Geographic
Elizondo
Elizondo tiene, tal y como apuntan desde National Geographic, como su punto icónico la presa de Txokoto, con fachadas y balcones que parecen trampolines, y un salto de agua que data de 1317. Un lugar que ofrece vistas inolvidables desde el puente. Desde allí, un paseo por la calle Jaime Urrutia lleva al Palacio barroco de Arizkunenea (1730), el Ayuntamiento y la iglesia de Santiago, que combina su estilo historicista de 1910 con un aire atemporal. Los txantxigorri, dulce tradicional, son el broche perfecto, revividos por 'El guardián invisible', que inspira rutas literarias por Elizondo y el valle.
Maya-Amaiur
Maya-Amaiur, al norte de Elizondo, es una joya del valle de Baztan con su única calle, flanqueada por un pórtico que evoca una fortaleza. La Casa Arriada, el Palacio Borda y el Palacio Arretxea convierten esta calle en un museo arquitectónico que representa las construcciones típicas de la zona. Cerca del pórtico está la Iglesia de la Asunción. Según señalan desde National Geographic es imprescindible visitar las ruinas del castillo de Amaiur, última resistencia del Reino de Navarra frente a Castilla en 1522.
Cascada de Xorroxin
Según los expertos de National Geographic, la cascada de Xorroxin es una de las rutas más atractivas del valle. Un salto de agua, considerado uno de los nacimientos de Baztan, que se alcanza desde Erratzu. La ruta, de 7 km y dificultad baja, discurre por una vereda húmeda, rodeada de muros musgosos y castaños gigantes. Es crucial llegar al final para admirar la cascada principal. El regreso, por el barrio de Gorostapolo, ofrece vistas abiertas con prados y la mole del monte Auza.