pamplona. Tres nuevos radares comenzarán a funcionar en las carreteras navarras a partir del próximo viernes 5 de agosto. En concreto, estarán situados en el punto kilométrico 401,55 del margen derecho de la Autovía del Norte (A-1), en el kilómetro 93,36 del margen izquierdo de la N-113 (Pamplona-Madrid) y en el punto 32,50 del margen derecho de la N-121-A (Pamplona-Behovia). De esta forma, en Navarra permanecerán implantados cuatro radares fijos, dado que se mantiene el instalado en la A-15 a la altura de Lekumberri.
Según explicó Vicente López, jefe provincial de Tráfico, que participó en una rueda de prensa junto a Elma Saiz, delegada del Gobierno en Navarra, los puntos elegidos para la instalación de los nuevos dispositivos obedecen a tres criterios que suponen un condicionante de riesgo para los conductores. De este modo, detalló López, los radares controlarán tramos donde el exceso de velocidad se ha mostrado como un "factor desencadenante" de accidentes, puntos "singularmente conflictivos" como túneles o vías con una alta densidad de camiones, y carreteras secundarias "conflictivas" donde no llegan los controles de la Guardia Civil y la Policía Foral.
Estas consideraciones, apuntaló López, fueron consensuadas por la Jefatura Provincial de Tráfico, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, la Policía Foral de Navarra y el departamento de Obras Públicas del Gobierno de Navarra. Igualmente, insistió el jefe provincial de Tráfico, estos nuevos radares responden a las recomendaciones de la Unión Europea, que inciden sobre la reducción de velocidad en las carreteras, la conducción y el alcohol y el cinturón de seguridad.
Sobre el primer punto, la velocidad en las carreteras, López manifestó su convicción de que los radares tienen un efecto disuasorio más allá de los dos kilómetros de margen desde la señal que avisa el radar y el propio aparato. Según indicó, los conductores que conocen la carretera recuerdan la existencia del radar y tanto varios kilómetros antes como después, "reducen su velocidad". Además, en este mismo sentido, recordó que, aproximadamente, existen diez radares móviles en Navarra, que también contribuyen a que los conductores extremen la precaución.
Localización de los radares Los nuevos dispositivos están anunciados en paneles luminosos o con señales verticales fijas y, además, su ubicación exacta se publica en la página web de la DGT. Ahí se puede ver que el radar de la N-121-A se encuentra en el punto kilómetro 32,5 en sentido Francia, justo detrás del semáforo de advertencia a la salida del túnel de Almandoz y en un tramo limitado a 90 kilómetros por hora. El aparato, además, está señalizado con una antelación de 1.200 metros.
Por su lado, el radar de la A-1 se localiza en la salida de Alsasua, cerca de la muga con Guipúzcoa, en un tramo cuya velocidad límite es de 110 kilómetros por hora. Este dispositivo entraña cierto riesgo, dado que se halla situado disimuladamente debajo de otro panel que informa de la entrada a una vía de servicio. Por último, el aparato de la N-113 se localiza en el punto kilométrico 91,3, cerca de Cintruénigo en sentido Pamplona.