“En dos días nuestra vida cambió completamente. Afganistán, mi país, vuelve a estar con en 2001. Ahora las mujeres no pueden ni estudiar ni trabajar y algunas tienen que sacar a sus familias adelante. La situación es muy difícil y todo el mundo quiere huir de Afganistán”. Khalid Jalali, refugiado afgano en Navarra, no pudo contener el llanto mientras explicaba la situación en la que se encuentra su país tras el regreso de los talibanes al poder.

Khalid ha sido durante años traductor de las tropas españolas en Afganistán, las cuales llevaron a cabo sus operaciones en las regiones de Badghis y Herat, y pudo abandonar el país en agosto en el marco de la Operación Antígona. Ahora, no puede evitar emocionarse al hablar del sufrimiento de su pueblo: “Después de que se fuesen los talibanes en las ciudades había mucha más seguridad y libertad, especialmente para las mujeres. Nadie se esperaba lo que pasó, parece que fue un acuerdo entre los talibanes y el presidente porque los soldados no pudieron ni defenderse”, ha reflexionado Khalid en declaraciones a Efe tras la rueda de prensa de CEAR en Pamplona.

Según ha detallado, los 300.000 soldados afganos que durante veinte años habían sido adiestrados por Occidente no ofrecieron resistencia a los talibanes, que recobraron el control del país en cuestión de semanas.

El refugiado ha destacado que “es muy difícil” para los afganos continuar allí puesto que tienen problemas económicos, de seguridad y no hay trabajo. En los últimos 20 años, ha señalado, “la situación cambió mucho” y, aunque “había problemas en algunas provincias”, en las ciudades grandes “había un cambio importante” con “mayor seguridad, libertad y trabajo”, por lo que muchas personas se fueron a vivir del campo a estas urbes. “Ahora mucha gente ha tenido que abandonar las ciudades porque no puede sobrevivir y vuelven a sus pueblos donde no hay nada”, ha relatado con tristeza.

Refugiados en Pakistán e Irán

Las imágenes de cientos de personas abandonando el país en avión desde el aeropuerto de Kabul dieron la vuelta al mundo, pero no todos pudieron huir por vía aérea. Muchos cruzaron la frontera a Irán o Pakistán y en su mayoría se encuentran en una situación complicada puesto que “no pueden trabajar y tienen muchos problemas” porque “no les tratan bien”.

Por ello, en su discurso Khalid ha reclamado que “es importante que puedan venir de manera segura” y que los procesos de reagrupación familiar sean “más rápidos” para que la gente que ha huido pueda traer a los suyos. “El mundo no tiene que olvidar Afganistán, necesitamos apoyo, necesitamos un cambio, con este Gobierno no es posible vivir. Por favor, que no quede en el olvido”, ha suplicado.

A pesar de que ha reconocido que en España tienen seguridad y tranquilidad, el traductor ha aludido a las dificultades que encuentran sobre todo a la hora de conseguir una vivienda, pues “los dueños de las casas piden nóminas que no hay, contratos de trabajo y seguro de impago” que hace que para ellos sea casi imposible conseguir un hogar.