El Movimiento Feminista de Euskal Herria ha propuesto este 8 de Marzo trabajar para la próxima convocatoria de "una huelga feminista general" en respuesta a "los recortes de derechos fundamentales" y en favor del "derecho universal a los cuidados y que éstos dejen de ser negocio".

En un comunicado difundido en el Día de la Mujer, el colectivo indica que ante los "recortes" de derechos y el actual sistema "que se produce y reproduce gracias a la explotación" de los cuerpos de las mujeres, plantea "desde hoy una lucha articulada desde los territorios hacia una huelga feminista general".

Huelga feminista

El movimiento vasco ha señalado que pretende iniciar "un proceso compartido" organizándose "pueblo a pueblo y en cada barrio" para generar alianzas y propuestas conjuntas con los movimientos populares, sociales y sindicales con el fin de "crear una agenda política y de reivindicaciones".

El colectivo aboga por "poner los cuidados en el centro porque históricamente han sido realizados por mujeres" y han sido "invisibilizados e infravalorados a nivel político, social y económico".

Apuesta, en este sentido, por "un derecho colectivo al cuidado, es decir, por el derecho de todas las personas, a lo largo de toda la vida a dar y recibir cuidados en condiciones dignas y desde el compromiso".

Cuidados

Según puntualiza, este planteamiento "implica la capacidad de decisión sobre cuánto, cómo y a quién queremos cuidar; cuánto, cómo y por quién queremos ser cuidadas, incluyendo el derecho a decir que no a los cuidados".

Para el movimiento feminista, en la actualidad los cuidados "son un eje de violencias y desigualdad para las mujeres trabajadoras: la raza, la situación de extranjería, la edad, la red y el estatus social se entrecruzan y retroalimentan", considera.

Entre las integrantes del colectivo, "estamos también -se señala- las mujeres que hemos tenido que dejar nuestros hogares, familias, redes... para venir aquí a cuidar de otras familias, en situaciones de explotación laboral y sin otra elección porque la ley de extranjería nos criminaliza, persigue: nos mata".

"Como mujeres migradas, trabajadoras de cuidados y de hogar -añade el comunicado- denunciamos la violencia machista, racista, sexual y colonial que atraviesa nuestros cuerpos día a día, en los domicilios de Euskal Herria, con el régimen del empleo de hogar interno y las políticas públicas que las amparan".

Reivindicaciones

El movimiento feminista también denuncia los recortes en el ámbito público y "el vaciamiento de la atención primaria y de la sanidad", así como "el encarecimiento de la vida, la vivienda inalcanzable, que no podamos pagar la factura de la luz y el gas mientras que Iberdrola triplica sus ganancias...".

Según considera, todo ello forma parte de "una estrategia deliberada de las empresas y de los gobiernos de la Comunidad Autónoma Vasca de Nafarroa junto con el Estado francés y español para mercantilizar, privatizar y especular con diferentes necesidades de cuidados".