El cierre temporal de la atención a partos en el Hospital García Orcoyen debido a la falta de profesionales ha concitado las críticas desde varios sectores sociales, incluidas las mujeres embarazadas que esperaban ser atendidas en el centro, en el que han presentado una reclamación tras una marcha de protesta.

A la iniciativa, convocada por redes sociales al conocer ayer el anuncio del Gobierno de Navarra de que temporalmente se derivarían los partos a los hospitales de Pamplona y Tudela, se han sumado cientos de personas, que se han reunido ante la Iglesia de Recoletas de Estella y han marchado hasta el Hospital García Orcoyen. La intención era registrar allí una queja por la desatención que supone este cambio, ya que mensualmente se registran unos 25 nacimientos en el centro hospitalario estellés, aunque también la falta de personal afecta al servicio de Ginecología que atiende a otras muchas mujeres que no están embarazadas.

Así, ha sido cerca de un millar de personas, entre ellas la alcaldesa de Estella, Marta Ruiz de Alda (UPN), el exalcalde Koldo Leoz (EH Bildu), cuya formación ha acudido con toda la representación municipal, además del parlamentario Txomin González y del exregidor de Gares Oihan Mendo, y además ha habido representación municipal de Contigo Zurekin y de otros representantes de ayuntamientos cercanos. En declaraciones a los periodistas Tamara Garayo, una de las mujeres embarazadas promotoras de la protesta, explicó que "nos enteramos ayer y nos hemos reunido para mostrar el desacuerdo" con una medida que aunque ha dicho que tenían "sospechas" de que se podía tomar, debido al cada vez menor número de profesionales en este área, ayer conocieron de forma oficial.

El del parto es "un momento de vulnerabilidad", ha advertido para explicar que por ello es especialmente penoso "tener que coger el coche y hacer 40 kilómetros. Aparte del riesgo que supone ponerte de parto, montarte en el coche y salir a la carretera, y que eso se puede acelerar, eso nos produce miedo e inseguridad", ha explicado.

También ha expresado su esperanza en que la medida "no sea definitiva sino temporal y que se solucione cuanto antes. Para eso estamos aquí, para exponer nuestra queja", ha dicho Garayo, tras valorar el masivo apoyo a la iniciativa de este jueves, que "deja ver que afecta a mucha gente, no solo a las que estamos ahora embarazadas sino a las que puedan estar en el futuro".

Por otro lado, la noticia del cierre temporal de este servicio en el Hospital de Estella ha sumado quejas desde otros ámbitos, como el de la Plataforma Navarra de Salud, que en una nota revela que la falta de personal que ha motivado esta situación se debe a que seis de los ocho ginecólogos del García Orcoyen están de baja, si bien "otra gestión de la situación era posible" ya que en algunos casos era conocida la previsión. "La vuelta a ser atendidos los partos en el Hospital García Orcoyen debe restaurarse de la manera más urgente posible y la ciudadanía debe ser considerada en un proceso de participación en la búsqueda de soluciones", zanjan.

Asimismo, el sindicato LAB ha achacado el cierre a la "falta de previsión" del Departamento de salud, "cuya dejadez está desmantelando los servicios sanitarios públicos de la zona". Con 62.000 personas a las que dar cobertura sanitaria, en Tierra Estella "no se ha invertido ni un solo euro en disminuir las listas de espera", asegura el sindicato, que incide en que  en el caso de la atención ginecológica "con una plantilla totalmente diezmada desde hace meses no se ha acometido ninguna medida correctora".

Varias asociaciones vecinales como las de los barrios de Lizarra, San Miguel, El Puy, la asociación gitana Ker Cali, Argi-Arieta, la asociación de vecinos de Iturrieta y El Camino, la comunidad de vecinos San José, así como vecinos del Casco Viejo de Estella-Lizarra firmaron una nota en la que denuncian que "desde hace un tiempo estamos constatando un empeoramiento en el servicio que ofrece la sanidad pública en Tierra Estella, no se cubren las bajas de especialistas (pediatría, dermatología…) y se deriva a los pacientes a más de una hora de su residencia habitual. Ahora para dar la puntilla a un servicio que se lleva asistiendo desde el Hospital García Orcoyen, se dejarán de atender los partos lo cual pone en peligro tanto a madres como a su descendencia y en una encrucijada a sus familias que tendrán que capear con sus consecuencias y posibles pérdidas. Por eso desde la coordinadora de Asociaciones de barrio y Comunidades de vecinos y vecinas de Estella-Lizarra demandamos una recuperación de los servicios perdidos a la mayor brevedad posible".

Igualmente, la Plataforma Navarra de Salud ha manifestado, ante la decisión de Salud del Gobierno foral de que los partos de las pacientes del Área de Salud de Estella sean de atendidos en Pamplona y Tudela de manera temporal, que el departamento de Salud "debe garantizar la atención en todas las áreas de salud de la Comunidad de una manera equitativa, estableciendo los mecanismos necesarios para ello" y ha añadido que los partos en el Hospital García Orcoyen "deben restaurarse de la manera más urgente posible".

En un comunicado, la Plataforma ha mostrado su apoyo a la manifestación convocada por un grupo de mujeres embarazadas y madres recientes del área de Salud de Estella para este jueves, día 7 de diciembre, a favor de la disposición de los recursos necesarios en el Hospital García Orcoyen bajo el lema 'La sanidad es nuestro derecho y se defiende'.

Desde la Plataforma se ha indicado, ante el hecho de que 6 de los 8 ginecólogos en Estella está de baja por diversos motivos, que "algunas bajas eran previsibles y del resto se puede saber las duraciones esperadas según los procesos". A su juicio, "otra gestión de la situación por tanto era posible".

Según ha expuesto, "la realidad actual no parece ajena a las políticas permisivas con la desidia y el fomento de la actividad sanitaria privada en ginecología en el Área de Estella de la legislatura anterior". Y ha añadido que "las organizaciones sindicales, las entidades sociales, los ayuntamientos, etc deben ser considerados a la hora de comunicar posibles actuaciones que afectan a los derechos sanitarios de la población".