La Universidad de Navarra ha celebrado la graduación de los 79 becarios Alumni que este año finalizan sus estudios. El acto, que tuvo lugar en el aula Magna del edificio Central, estuvo presidido por Rosalía Baena, vicerrectora de Estudiantes, y contó con las intervenciones de Isabel Olloqui, directora de Desarrollo Corporativo de la Universidad de Navarra; Ignacio López Goñi, catedrático de Microbiología, director del Museo de Ciencias de la Universidad y padrino de la XX promoción; y de Marcos Casado, estudiante de la Facultad de Medicina, que habló en representación de sus compañeros.

Un total de 429 jóvenes cursan este año sus estudios gracias a este programa, dirigido a alumnos con buen expediente que desean estudiar en la Universidad de Navarra. El presupuesto de las becas es de más de 3,6 millones de euros, con un importe medio de 8.607 euros por beca.

La vicerrectora de Estudiantes y Relaciones Internacionales, Rosalía Baena, tuvo palabras de agradecimiento para donantes, gestores, profesores y el servicio de Desarrollo Corporativo de la Universidad, que hacen posible el programa de Becas Alumni. “Este programa es bueno no solo para los alumnos y sus familias, pues les ayuda a alcanzar lo que se han propuesto. También lo es para la sociedad en su conjunto, porque contribuimos a formar personas que trabajan y se comprometen, y creamos una Universidad abierta a todos donde hay una pluralidad de perfiles. Y por supuesto es también bueno para la propia Universidad, pues sois vosotros los que hacéis que sea excelente, con vuestro esfuerzo y vuestras aspiraciones”, afirmó. Rosalía Baena felicitó a los 79 graduados y les animó a ser “embajadores de la Universidad y de los grandes ideales que aquí nos sustentan, ideales que pueden hacer que muchas personas encuentren el verdadero norte en sus vidas”. 

20 AÑOS DE BECAS ALUMNI

Las Becas Alumni se pusieron en marcha en 2003 con el objetivo de que alumnos con talento puedan cursar sus estudios en la Universidad de Navarra con independencia de su situación económica. El programa se sostiene gracias a la aportación de empresas, amigos de la Universidad, antiguos alumnos y de otras personas e instituciones que creen en el proyecto del centro académico.

Desde entonces, se han beneficiado de estas ayudas 1.947 universitarios que han recibido 39,6 millones de euros, que han aportado 17.371 personas y 51 empresas. El programa Becas Alumni está incluido en el proyecto +Becas, que forma parte de la Estrategia 2025 de la Universidad de Navarra. 

En el acto intervino también el profesor Ignacio López Goñi como padrino de la promoción. “Todos necesitamos de todos y juntos llegamos mucho más lejos. Esto es lo que nos mueve a trabajar en la Universidad de Navarra: amar la libertad, tender puentes, no levantar muros, cooperación creativa para solucionar los problemas de la sociedad actual”, comentó. Asimismo, pidió a los graduados que se involucren en el futuro que les aguarda y que ayuden a cambiar el mundo, poniendo todo su trabajo creativo, su ciencia y su inteligencia al servicio de los demás. “Estoy convencido de que lo conseguirán, porque ustedes, esta promoción de becarios Alumni de la Universidad de Navarra, son los mejores”.

En la misma línea, Isabel Olloqui, directora de Desarrollo Corporativo de la Universidad de Navarra, dijo: “Este programa nació hace 20 años para atraer talento a la Universidad de Navarra para que pueda -más tarde- ser diseminado por el mundo y contribuir a hacerlo mejor”. Olloqui instó a los becarios Alumni a ser generosos, trabajar con vocación de servicio a la sociedad y contribuir a que la cadena de ayuda a la excelencia de Becas Alumni “no desaparezca jamás”.

Para finalizar, Marcos Casado manifestó su gratitud y la de sus compañeros a la Universidad y a quienes han hecho posible su participación en el programa: “La Beca Alumni es un reconocimiento al esfuerzo, a la entrega y a la pasión por el aprendizaje. Pero más allá de eso, es un testimonio de magnanimidad. La magnanimidad de aquellos que, habiendo recorrido su propio camino académico deciden apostar por el futuro de otros”, expresó. También se dirigió a las familias, “que nos han inculcado desde nuestra juventud los ideales de entrega y servicio desinteresado”. A punto de terminar sus estudios en la Universidad, pidió a sus compañeros vivir “con los más altos ideales de generosidad, bondad y amor”. “Esta beca nos reta a dar lo mejor de nosotros mismos, no por reconocimiento o recompensa, sino sencillamente porque es lo correcto”, concluyó.