El consejero de Salud del Gobierno foral, Fernando Domínguez, ha asegurado que se está trabajando en una reorganización de los centros de atención sanitaria de Navarra, pero ha destacado que se mantendrán "intactos" los puntos más aislados aunque no haya apenas pacientes.

Domínguez, en respuesta a una pregunta parlamentaria de UPN, ha señalado que el sistema sanitario tiene que transformarse y esto supone tomar decisiones y hacer cambios "que quizá no gusten a la ciudadanía, a los profesionales o los alcaldes".

El consejero ha afirmado que, en todo caso, "el criterio técnico y de disponibilidad de recursos, sobre todo humanos, es el que va a determinar por dónde vamos, no el criterio político".

"Sabemos que son medidas impopulares, pero en el Departamento de Salud consideramos que hay que hacerlo para cambiar una situación que ya es insostenible", ha indicado Domínguez, quien ha incidido en que los cambios se harán con "criterios técnicos, sanitarios y de equidad".

El portavoz de UPN, Javier Esparza, ha acusado de "mentir" a la presidenta María Chivite y al consejero, ya que "están sacando a gente de las listas de espera sin que les vea el médico especialista", en concreto 12.500 personas desde enero.

Además, ha denunciado el cierre "unilateral" del punto de atención continuada de Olite.

El consejero ha apuntado al respecto que con el Ayuntamiento de Olite "hablamos al comienzo de legislatura y sabía lo que iba a pasar con el servicio de urgencias".