La campaña del Gobierno de Navarra para el 8M de este año se basa en contraponer una falsa idea en torno a la situación actual de las mujeres con la argumentación o datos que la desmienten. Así, ante la afirmación “yo soy feminista. Ayudo en casa”, se plantea la respuesta de que “no se trata de ayudar, sino de corresponsabilidad en las tareas y los cuidados en igualdad de condiciones”.

EXCEDENCIAS

Así, según los datos de la Seguridad Social, el número de excedencias dadas de alta en los nueve meses del año 2024, entre enero y septiembre, fue de 42.808, de las que 36.177 correspondieron a mujeres (84,5%) y 6.631 a hombres (15,5%). En Navarra, las solicitudes indican que de las 1.840 excedencias concedidas, el 83% lo han sido para mujeres y el 17% para hombres. De hecho, en la Comunidad Foral es donde más suben las excedencias respecto al mismo periodo del año pasado, con un ascenso del 5,4%, por delante de la CAV (1,2%). Y baja especialmente en la Región de Murcia (-9,7%) y Madrid (-8,5%).

Los trabajadores y trabajadoras pueden solicitar excedencia para atender a hijos/as o menores acogidos o para el cuidado de otros familiares. Los tres primeros años de excedencia para el cuidado de un hijo/a o menor acogido tienen la consideración de periodo de cotización efectiva a efectos de las prestaciones de la Seguridad Social por jubilación, incapacidad permanente, muerte y supervivencia, maternidad y paternidad. También se considera efectivamente cotizado, a efectos de esas prestaciones, el primer año de excedencia para el cuidado de otros familiares.

LA CAMPAÑA

La campaña del 8M insiste en que, ante la tesis de que “la brecha salarial no existe”, se argumenta que “el salario bruto medio de los hombres es de 32.005 euros” y “el de las mujeres es de 26.033 euros”. Frente a la idea “Ni machismo ni feminismo. No me gustan los extremos”, se desmiente este falso dilema argumentando que no se trata de elegir, sino que es “cuestión de derechos humanos”, porque “el machismo promueve la superioridad de los hombres”, mientras que “el feminismo defiende la igualdad”.

Entre las principales causas de la brecha salarial destaca una mayor presencia de mujeres en empleos a tiempo parcial, en trabajos socialmente peor valorados (mayor presencia en el sector servicios frente al industrial, más masculinizado y con mejores condiciones) o su dedicación a trabajos no remunerados de cuidados, que limitan su disponibilidad de horas para realizar un trabajo remunerado.

Respecto a la transformación del modelo de cuidados, es precisamente una de las prioridades del Gobierno de Navarra para lograr una sociedad más igualitaria. Los cuidados se definen como el conjunto de esfuerzos, tareas y trabajos, públicos y privados, necesarios para la reproducción y el crecimiento de la vida humana, con dignidad, autonomía y bienestar. Se trata de una tarea tradicionalmente resuelta de manera gratuita en las familias, en la mayor parte de los casos por las mujeres, lo que se considera una carga que contribuye en gran medida a perpetuar desigualdades de género. Es por ello que las políticas de los últimos años vienen centrándose en universalizar su responsabilidad y fomentar la corresponsabilidad de los hombres en esta tarea, así como desarrollar un sistema de recursos y servicios públicos que ayude a atender las crecientes necesidades de cuidado.

Además, coincidiendo con el 8-M, la presidenta de Navarra, María Chivite, entregará el Premio Berdinna 2025 a la magistrada Esther Erice por ser una referente en el “ámbito de la justicia con perspectiva feminista”. La candidatura de Erice, presentada por la Coordinadora de Organizaciones de Mujeres y/o Feministas (COMFIN), ha sido seleccionada por el jurado que otorga este premio a la igualdad entre las 16 opciones presentadas este año.