Una fuerte granizada, de no más de cinco minutos de duración, se ha saldado con tres heridos y cuantiosos daños materiales. Los hechos han tenido lugar a primera hora de la mañana en Zumaia, según ha confirmado a este periódico el alcalde de la localidad: Iñaki Ostolaza. "Ha sido cuestión de tres minutos, cinco a lo sumo, pero ha sido tremendo", ha señalado el alcalde, que ha confirmado que los daños son "cuantiosos".

Para empezar, los coches que en ese momento (en torno a las 9.30 horas) se encontraban estacionados en las calles, han sufrido múltiples abolladuras en el mejor de los casos. Otros muchos han acabado con cristales y lunas rotas.

Además, muchos de los canalones de las viviendas del casco antiguo, así como de algunas empresas del polígono industrial han sido agujereados por el potente granizo, que ha llegado a alcanzar el tamaño de un huevo.

Pero además de estos desperfectos, tres personas han tenido que ser atendidas en el ambulatorio a consecuencia de la tormenta: una de ellas con un chichón y las otras dos, con heridas que han requerido de "puntos de papel", ha informado Ostolaza.

Además, el Departamento de Salud del Gobierno Vasco ha prohibido el baño en la playa de Santiago y en la ría por superar el límite permitido de la bacteria E. coli. Según ha explicado Ostolaza, es "bastante habitual" que en situaciones de intensas lluvias, como las de los últimos días, se detecten altos niveles de esta bacteria debido al deficiente saneamiento que hay en la zona de Oikina y Aizarnazabal. Sin embargo, el alcalde ha lanzado un mensaje de tranquilidad, ya que se trata de una situación "puntual" y se ha mostrado confiado con que el baño se restablezca pronto.