La capital alavesa sufrió en la tarde del jueves una gran granizada que llegó a descargar 26,7 litros de agua por metro cuadrado en una hora. Los cielos oscuros y el bochorno dieron paso a una serie de truenos pero que desembocaron en precipitación intensa minutos después de las 18.00 horas para hacerlo de nuevo con incluso más violencia pasadas las 20.00 horas, con bolas de granizo del tamaño de pelotas de golf, tras cruzar un frente la ciudad de norte a sur.

Varias calles quedaron anegadas debido a que las ramas y hojas de los árboles han obstaculizado los desagües, lo que provocó dificultades en el tráfico de la capital vasca, que no vivía una tormenta de este calado el 1 de julio de 2009.

Garajes, puentes y aparcamientos subterráneos fueron los refugios elegidos por los vitorianos que se vieron sorprendidos en sus vehículos y decidieron cobijarse en estos lugares.

La Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet, registró durante la tarde del jueves una precipitación máxima en una hora de 26,7 litros de agua por metro cuadrado en estación meteorológica de Arkauti, en Vitoria-Gasteiz.

Además, se recogieron 26,6 litros/m2 en la estación de Ozaeta, en Barruntia (Álava)19,2 litros/m2 en la estación de Ilarduia, en la localidad alavesa de Asparrena, y 15,3 litros/m2 en la de Etura, también Barrundia, según informó el Departamento vasco de Seguridad.