Una ambulancia que circulaba sin pacientes y solo con el conductor como ocupante sufrió el mediodía de este miércoles un tremendo susto cuando circulaba por la Autovía de la Barranca (A-10), al sufrir el impacto de un buitre que rompió la luna delantera del vehículo, la atravesó y terminó malherido en el reposapiés de la zona del copiloto.

La luna de cristal quedó destrozada pero por suerte el conductor, un joven de Vitoria que regresaba desde Pamplona a su domicilio tras haber completado su jornada, resultó ileso en el percance. La ambulancia, de la empresa Nuestra Señora del Olmo de Azagra, sufrió importantes daños materiales. La Policía Foral acudió hasta el lugar, al igual que personal de la Protectora de Animales para hacerse cargo del buitre, que había resultado malherido pero no llegó a morir.

El buitre, dentro del vehículo.

El buitre, dentro de ambulancia.

El ave salió con vida del accidente.