Daniel Porter, de 37 años, sufrió un episodio de lo que se denomina amnesia global transitoria. Este hombre vive en Texas, y a diferencia de las demás personas, no fue una experiencia momentánea la que vivió.

Cuando se despertó una mañana, Porter estaba seguro de que era una adolescente de 16 años. El suceso fue traumático ya que al abrir los ojos no reconoció a su esposa, quien dormía a su lado.

Al tener en mente que era menor de edad, se llevó un gran susto porque pensaba que podría estar secuestrado. Como es normal en una situación así, el afectado entró en pánico de manera inmediata.

No solo se pensaba que era un adolescente, sino que el hombre tampoco recordaba nada de lo que había ocurrido en su vida en los últimos 20 años.

Su esposa Ruth explicó que “se despertó una mañana y simplemente no tenía idea de quién era y ni dónde estaba. Estaba muy confuso. Me dí cuenta de que no reconoció la habitación”.

Y es que, Porter incluso no recordaba ni siquiera a su pequeña hija de 10 años. La esposa aseguró que al hombre se lo veía desubicado e intentando buscar una vía de escape de aquella extraña situación.

El trauma fue mayor cuando el hombre se miró al espejo y vió su apariencia. Los padres del señor junto con la esposa intentaron por todos los medios que se tranquilizara.

Al no poder lograrlo, su familia decidió llevarlo a un médico para que determinara lo que estaba ocurriendo.

Los médicos aseguraron que se trataba de una amnesia temporal y por lo tanto no podían explicarse la razón por la cual permanecía presente. Esta afección causó que Porter tuviera que dejar su trabajo, por la incapacidad de realizarlo.

Por otra parte, sus gustos cambiaron y volvieron a los que tenía cuando era menor de edad y aún seguía en pleno crecimiento personal.

Tras varios estudios, los expertos creen que la causa puede ser estrés emocional. Los familiares aseguran que el año pasado este hombre sufrió en poco tiempo varias decepciones como una lesión severa e incluso atravesó dificultades económicas.

Está claro que Porter no se dará por vencido, y además es consciente de su problema, el cual lo trata con normalidad en las redes sociales a través de distintos post.

En definitiva, un suceso que demuestra que hay momentos tan complicados en la vida del ser humano que nuestro cuerpo, a modo de autodefensa, crea estos cambios tan radicales para evitar problemas más graves.