El estrés, las bajas temperaturas y la contaminación acaban pasando factura también a nuestra piel. ¿Qué ocurre? Que nos encontramos con un rostro apagado y triste. Sin embargo, con unos sencillos gestos podremos devolverle la luminosidad y dar la bienvenida a la primavera con la mejor de nuestras sonrisas. ¡A apuntar!

Limpieza en profundidad

El primer paso (y el más importante, según los especialistas) para tener una piel impoluta es la limpieza. Puedes ir a un centro estético y hacerte un peeling superficial, pero también puedes exfoliarte la piel en casa. Si optas por la segunda opción, prueba a ponerte una mascarilla de carbón activo. Su principal función es la de eliminar los puntos negros y también las espinillas.

Hidratación profunda

Es fundamental que no falten los ácidos grasos y los omegas en nuestras cremas. Además, las mascarillas nutritivas también conseguirán devolvernos a nuestro rostro la luminosidad perdida y mantendrán la hidratación de la piel. Las hay de tisú, blandas en modo crema o de las que se acaban transformando en una careta dura.

Suma Vitamina C

Una dosis extra de esta vitamina es lo que nuestra tez precisa para recuperar la luminosidad, ya que es un poderoso antioxidante que, además, lucha contra el envejecimiento. Apuesta por cosméticos que contengan en su formulación altas concentraciones. Los podrás hallar en cítricos como el pomelo, la naranja o el limón.

No te olvides de la dieta ni del sol

No se puede olvidar la dieta. Si es equilibrada y sana, con alimentos ricos en antioxidantes, carotenos y vitaminas A y E, es muy beneficiosa. Además, hay que incrementar en esta época la protección. En ocasiones, el sol de primavera es más fuerte de lo que parece y, además, la piel está más sensible ante sus efectos. Por eso, un día en la playa o en la montaña puede ocasionarnos algún susto en forma de inesperada quemadura, por lo que el uso de filtros solares adecuados se hace indispensable.

Efecto tensor

Los ojos son la zona del rostro que más delata el cansancio y la edad. Por ello, hay que disimular las bolsas y ojeras. Algunos sérums aportan, gracias a las proteínas que incluyen en su formulación, un efecto lifting inmediato. ¡Pruébalos!

Deja atrás el estrés y la ansiedad

Hay terapias o técnicas que resetean nuestro cerebro, como el silencio. Los expertos las recomiendan para personas con exceso de estrés y ansiedad. Cada día un tiempo diario de introspección, en silencio, con nuestros pensamientos, es bueno para la salud.

Frena la astenia

Antes de que la astenia de primavera te ataque, aumenta tus niveles de dopamina. Los niveles de felicidad, motivación, energía, alegría y bienestar se atribuyen naturalmente a esta neurohormona.

Aromaterapia en tu baño

La aromaterapia es capaz de resolver conflictos relacionados con el estrés que te afectan física y emocionalmente, generando tensión muscular, problemas de la piel y tensión mental.

haz ejercicio

También es ideal practicar unos minutos, a poder ser diariamente, de estiramientos lentos y suaves, porque la primavera controla las funciones de los ligamentos, músculos y tendones.

Dibuja el futuro

Los cambios de estación son momentos ideales para iniciar todos esos proyectos que se tienen en mente y no los hemos llegado a hacer. Una gran idea servirá no solo para mejorar en lo laboral, sino también para incrementar el estado de ánimo.

¡Empodérate!

Inicia la temporada incrementando la autoestima. Recurre a talleres que hay en todas las ciudades para aprender las herramientas necesarias para equilibrar tu salud, estrechamente relacionadas con las emociones, la energía y el desbloqueo.